Sofisma electoral
Bajo el sofisma de títulos acomodados, los tres principales partidos del sistema político nacional –PRM, PLD, FP- están inmersos en una alocada campaña electoral a destiempo y en franco desafío a la Ley, a la Junta Central Electoral y a una sociedad que vive tiempos de incertidumbre por el presente y futuro económico.
Los peledeístas le llamaron ‘consulta’, los perremeístas ‘reunión’, los de FP ‘encuentros’, pero no son más que actos de campaña con miras al posicionamiento por candidaturas y de movilidad pre electoral de los partidos.
A fin de cuentas es campaña abierta.
Por ello los senadores y diputados dan largas y largas a las necesarias enmiendas que requieren las leyes electoral y de partidos, toda vez que la actual –aprobada por los legisladores tras 15 años de ‘mamoneo’- ha resultado en un gran tollo, zarandeada y cuestionada por el Tribunal Constitucional, amén de incumplida y burlada por los políticos y partidos.
El presidente de la Junta, Román Jáquez, ha emitido serias advertencias, sobre la ilegalidad para el proceso electoral del 2024, la desbordada campaña actual, promovida y ejecutada por los dos principales partidos de la oposición, pero más serio aún por el partido de oficial y gran parte del funcionariato gubernamental en aprestos de reelección.
La Junta tiene que ‘meter en cintura’ a los partidos y políticos. Y tiene que presionar a que la sociedad se empodere del reclamo a los congresistas sobre las reformas a las leyes electoral y de partidos y está conminada a ‘tomar el toro por los cuernos’ y guiar el proceso de acuerdo con las leyes, sin contemplaciones, sin temores ni favores.