Noticias alentadoras sobre la economía nacional

Nuestro empresariado aporta entre el 84% y el 87% al producto interno bruto (PIB) nacional.

Si la economía crece es porque en las empresas, comercios y todo tipo de actividad económica hay gente esforzándose para que sus negocios marchen bien.

Gracias a ese espíritu resiliente, la República Dominicana es lo que hoy es.

La perseverancia caracteriza a nuestros ciudadanos. La pandemia de la Covid-19 lo confirmó.

Seguida de cierres de empresas y las consecuentes caídas en la productividad y el empleo, el mundo atestiguó una dramática desaceleración del crecimiento. De 2.6% (2019) el PIB mundial cayó a -3.3% (2020).

Islas antillanas, con economías similares ancladas al turismo, redujeron en -19% (Bahamas), -14% (Belice), -20.2 (Antigua y Barbuda), -18% (Curaçao), -10% (Jamaica), -20.4 (Santa Lucía).

Otras economías, más fuertes, sufrieron iguales embates: España: -10.8%; Francia, -7.9%; Libia -31.3%; México, -8.3%; Perú, -11.1% y la región Administrativa especial de Macao, China, -54%.

Entre nosotros, la caída fue -6.7%.

Sin embargo, ya en el 2021, gracias a esa laboriosidad y a los paquetes anti cíclicos despachados desde el gobierno a través del Banco Central, la economía recuperó el crecimiento, cifrándolo en +12.3%.

Los esfuerzos de los productores nacionales se orientan a continuar superarando esas crisis importadas; a ellas se suman los efectos de la guerra rusa en Ucrania. Los del gobierno, a tratar de impedir que afecten más a los ciudadanos y la estabilidad macroeconómica.

Recientemente, el Banco Central socializó evidencias de que persiste el avance hacia la recuperación: el empleo, determinante de la productividad, aumentó porque la tasa de “desocupados que busca trabajo activamente” redujo 1.6% en enero-marzo 2022, respecto a iguales meses del 2021. +226,730 lograron ocuparse; una cantidad que empujó esta tasa de desocupación abierta a niveles del 2019. Resalta que 105,913 de estos corresponden al sector económico formal (46.71%).

Junto a esto, en la actualidad y según el Banco Central, “se evidencia la notable expansión en el uso de medios de pagos electrónicos”. Crecieron (2008-2021), 503.5%. Durante el 2021 sólo el 4.4% de los pagos se hicieron con cheques y el 95.6%, por vía electrónica. Las normativas regulatorias implementadas por este regulador monetario propiciaron el impulso porque el tiempo de las transacciones redujo significativamente en tanto aumentaba su seguridad, optimizando el flujo monetario, factores potenciadores del crecimiento.

Finalmente, los reguladores del mercado de valores de nuestro país, Panamá, Guatemala, Honduras, El Salvador, Costa Rica, Ecuador, Curazao y San Martín reciben la propuesta del BanCentral dominicano de avanzar hacia la “convergencia regulatoria”, una “normativa acorde con las necesidades inherentes a los mercados y la adaptación ineludible a las nuevas tecnologías”.

El regulador monetario resaltó la importancia de la meta: los actores de este ámbito requieren garantías jurídicas y otros aspectos “relevantes para su fortalecimiento”, como la transparencia, la estabilidad macroeconómica, la certidumbre que brindan las autoridades a los inversionistas y el clima de paz y seguridad jurídica que genera confianza a los agentes del mercado”. Estos aspectos tipifican el clima de negocios nacional, amparado en leyes (N°249-17 y N°249-17) y normativas. En eso, RD es un modelo regional.