Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

COLABORACIÓN

Ucrania, el muro y el relato

Avatar del Listín Diario
FEDERICO JOVINE ARRENDELSanto Domingo

Todo conflicto necesita un re­lato explicativo, así como toda guerra necesita un casus belli como elemen­to cohesionador interno y justificador externo. Aunque la historia nunca ha pregun­tado quién tenía la razón, si­no quién ganó, siempre se cuida de guardar las formas.

En Ucrania se libra una guerra injustificada y asimé­trica, pero era una guerra que se veía venir, pues en ese conflicto se dirimen paradig­mas y relatos que avanzan en rumbo de colisión desde Yalta, y aun antes. Un con­flicto económico que no pu­do ser resuelto por la vía po­lítica, ahora se dirime por la vía militar y, detrás del telón de fondo, aguardan los ac­tores que esperan que sobre sus cenizas quede reconfigu­rado el nuevo orden mun­dial del siglo XXI.

Hemos visto por televi­sión y redes sociales imáge­nes desgarradoras y el mun­do se ha indignado con ellas, y con razón; las mismas imá­genes crueles y cotidianas en muchos países desde ha­ce más de 20 años (Irak, Li­bia, Siria, Afganistán, etc.) y que, sin embargo, han esta­do convenientemente ocul­tadas por los protagonistas de esos conflictos, precisa­mente para no despertar esa indignación (que en su mo­mento condicionó Vietnam) que hoy clama el cese inme­diato de una guerra, sin du­das, ilegal.

Quienes hoy se indignan por lo que ocurre en Ucra­nia, si no se indignaron por otras guerras, no fue por fal­ta de humanidad, solidari­dad o empatía, sino por falta de conocimiento, porque la información en torno a esos conflictos ha sido cuidadosa y deliberadamente ocultada y/o editada por sus respon­sables.

Los relatos se construyen de acuerdo con las agen­das, por eso llama a sospe­cha el paroxismo con que los medios trataron a fina­les de año la des[¿re?]com­posición política haitiana y, de repente, el silencio total frente a la misma, como si la violencia hubiera cesa­do y la situación se hubiera normalizado. Pero más lla­ma la atención las declara­ciones del Comité para la Eliminación de la Discrimi­nación contra la Mujer, de la ONU, dos días después que el presidente Abinader informara al congreso -jus­to el día en que dominicana celebra su independencia de Haití-, la construcción de la “verja fronteriza pa­ra tener un mayor control de los flujos migratorios y atajar allí mismo el contra­bando, el tráfico de perso­nas…”.

Hay que tener cuida­do en cómo se van cons­truyendo los relatos, ade­lantarse a ellos y, a cada argumento responder en contrario de manera acti­va, preventiva y a nivel de Estado, con el rigor, con­tundencia, urgencia y ce­leridad que el caso ameri­ta. Con una economía tan dependiente de la imagen (turismo y exportaciones de productos agrícolas a EUA y la UE), un mercado internacional fácilmente manipulable en términos visuales y consumidores que se decantan por los mensajes cortos, simples y potentes, quizás, más ade­lante, podríamos ser vícti­mas de esa misma indig­nación.

Tags relacionados