Mis relaciones con el beisbol

A los diez años de edad, en 1946, vine de Santiago a la capital.

Vivíamos en la vivienda número 109, en la inter­sección de las calles Beni­to González y Enriquillo. Al lado estaba el colmado “La Felicidad”, operado por los hermanos Felito y Antonito Gross.

Generalmente, en el colmado sintonizaban, por las noches, las emi­soras cubanas que trans­mitían los juegos de beisbol.

Yo me acostumbré a ir al colmado para, desde la acera o la puerta, escu­char los juegos, tal y co­mo lo hacían otros miem­bros de la vecindad.

Los equipos eran, pa­ra entonces, Habana, Al­mendares, Marianao y Cienfuegos. Yo simpa­tizaba con el Habana. Algunos de los pelote­ros notables de la épo­ca eran, Pedro Formen­tal, Chiquitin Cabrera, Hank “Ametralladora Thompson”, Conrado Marrero, Harry Kimbro, Tom Lasorda y muchos otros.

Recuerdo que en el año1948, cuando vinie­ron los Dodgers entonces de Brooklyn, con el pe­lotero sensación del mo­mento, Jackie Robinson y los Reales de Montreal para un juego de exhibi­ción, recuerdo que Felito Gross, me llevó al estadio de la Normal para ver ese juego en la barra de su bi­cicleta.

Después de haber co­menzado a transmitir “Your Hit Parade” en la HIZ, en el 1953, los di­rectivos de la emiso­ra me pidieron que fue­ra a las transmisiones de los juegos de pelota en el verano del 54, en el play de la Normal, ya que los narradores Bi­lly Berroa y Félix Acos­ta Núñez no hablaban el idioma inglés por lo que yo les serviría de intér­prete para realizar las entrevistas a los pelote­ros refuerzos norteame­ricanos.

Ese trabajo me me­tió de lleno en el beis­bol local y ahí conocí y me hice amigo de Felipe Alou, Manuel Mota, Te­telo Vargas, los herma­nos Guayubín y Chichi Olivo, Garabato Sackie, el gallego Muñoz, Pepe Lucas y tantos otros.

En 1963, cuando in­auguré mi emisora de entonces Radio Univer­sal, lo hice transmitien­do un juego de beisbol de Grandes Ligas en que lanzaba Juan Marichal.

Cuando recibí mi li­cencia para instalar una nueva emisora, pensé que debía hacer algu­nas cosas diferentes y se me ocurrió comenzar a transmitir juegos de beisbol de Grandes Li­gas garantizando aque­llos juegos que tuvieran la participación de ese primer gran grupo de peloteros dominicanos que ya jugaban a ese ni­vel.

Marichal tuvo uno de sus mejores años en el 63, incluyendo su no-hitter frente a los Colts de Houston, y su memo­rable e histórico due­lo a 16 innings frente a Warren Spahn.

Continuará…