VIVENCIAS
Conversión en tiempos fuertes
Cualquier tiempo es propicio para una autentica conversión que obedece a un llamado del Eterno para que se produzca un cambio en la conducta y en todos los supuestos que se haya cimentado el modo de ver y actuar en el ámbito del accionar.
Se aprecia lo anterior observando a nuestro alrededor a quienes los domina la esclavitud de los instintos y pasiones, que produce un vacío existencial porque no se han encontrado los verdaderos valores que aseguren la felicidad.
Cuando se vive aferrado a los apegos se presentan cantidad de ofertas y promesas que nunca llenarán esos vacíos existenciales.
Jesús con su propuesta de salvación propone otra forma de vida que obedece a seguir los criterios de Dios que a primera vista son difíciles, pero seguros, y al experimentarlos conocemos la verdad.
Mateo (6,1-6, 16-18) da la clave para iniciar esa conversión, cuidar de no practicar la justicia delante de los hombres solo para ser vistos; cuando se haga una limosna que no se cacaree; cuando se ore que no sea en público para ser visto; cuando se ayune, no poner cara de afligido.