CONTROVERSIA
La caravana por la vida y la Constitución
La Iglesia Católica y las Iglesias Evangélicas, de manera conjunta, han convocado a una gran caravana vehicular el próximo sábado 27 marzo por la defensa de la vida y del artículo 37 de la Constitución, ante la pretensión de grupos de ONGs financiadas desde el exterior para que se legalice el aborto en tres causales.
La convocatoria del pueblo cristiano y la unidad entre la Iglesia Católica y Evangélica se produce días después de que la senadora del Distrito Nacional participara de manera insólita en una manifestación de protesta frente al Palacio Nacional y en los días previos al conocimiento del proyecto de ley del Código Penal en la Cámara de Diputados.
La estrategia de los grupos pro-aborto que procuran imponer tres causales violando la Constitución es presionar al presidente Luis Abinader para que utilice su liderazgo y poder para imponer las tres causales, obligando a muchos legisladores del PRM a votar contra su voluntad en un tema de conciencia tan delicado como el derecho a la vida.
Se le quiere exigir al presidente Abinader, por parte de gente de su propio partido, que se involucre personalmente y se inmiscuya en el Poder Legislativo. De ahí que quienes escondidos manejan los hilos de la protesta la hayan direccionado al Palacio Nacional.
Dentro del PRM, la posición más sensata en el Congreso la ha tenido Alfredo Pacheco, presidente de la Cámara de Diputados. Él ha dicho, con toda la razón, que RD no resiste que el nuevo Código Penal permanezca secuestrado y empantanado, a pesar de estar plenamente consensuado por el conflictivo tema del aborto y las tres causales. Por eso ha dicho que lo justo y sensato es que se apruebe el Código Penal y se deje para discutir en un proyecto de ley especial el tema de las tres causales.
La pregunta es: ¿por qué los grupúsculos pro- aborto partidarios de las tres causales le temen a que este espinoso tema se trate de manera particular en una ley?
La respuesta es simple y sencilla: No tienen los votos en las cámaras para aprobar las tres causales. Necesitan las 2/3 partes y no la tienen. Su estrategia, entonces, es el cambalache, el chantaje. Si no aprueban las tres causales, el país se queda indefinidamente sin nuevo Código Penal. Total, un esfuerzo inútil, porque habría que modificar previamente la Constitución de la República.
A ese chantaje no pueden ceder ni el Presidente ni el Congreso. Si no hay votos requeridos en el Congreso para imponer las tres causales la propuesta debe ser desechada como cualquier otra iniciativa legislativa, pero jamás constituirse en un escollo para aprobar una pieza tan importante como el Código Penal.
El próximo 27 de marzo, saliendo desde la explanada del estadio Quisqueya, a las 9:00 A. M., participemos todos en la caravana por la vida. Unidos y sin distinción partidaria. Es momento de gran unidad nacional sobre la defensa de la vida y el artículo 37 de la Constitución.