EN LA RUTA
El canciller
Resultan altamente tranquilizadoras las palabras del ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, dando garantías que desde el gobierno no existen planes para establecer una política de refugiados.
Lo externado por el canciller, justo en la celebración del mes de la patria, finiquitan rumores en virtud a las supuestas pretensiones de grupos foráneos y con respaldo vernáculo de utilizar el Plan de Contingencia para Flujos Masivos Inmigrantes en República Dominicana (PCFMI) para instalar nacionales haitianos indocumentados en las 5 provincias fronterizas del país. Y es que una vez salió a la luz pública a finales del año pasado, el PCFMI desató las ojerizas de aquellos que lo veían como un ariete de esos alegados planes fusionistas. Para abunde, la propia designación de Álvarez, gran experto del ámbito diplomático, pero un histórico abanderado en las causas pro derechos humanos, hacía el panorama más difuso. Sin embargo, al establecer que el gobierno no reconoce al PCFMI como documento vinculante, y explicar que el mismo no fue aprobado por el Consejo Nacional de Migración, el canciller y más específicamente gobierno, dejan clara su postura ante el tema. Según el artículo 128 de nuestra Constitución, el presidente de la República es el jefe de la política exterior. Por tanto, lo anunciado por Álvarez puede perfectamente ser asumido -y reclamado- como un compromiso de Luis Abinader y el Estado dominicano.