EL CORRER DE LOS DÍAS
Sven Loven y “la cultura taína”
Y II
Las escuelas arqueológicas norteamericanas, de las que la Universidad de Yale, con el profesor Irving J, Rouse a la cabeza iniciaran la clasificación de objetos con acuerdo a las formas de alfarería y decoraciones, acertando al determinar que hubo culturas agrícolas diferentes como por igual culturas anteriores recolectoras, las cuales podían seguirse al formar series que sus artefactos destacaban el trayecto de las mismas.
Vale decir que, desde casi comienzos del siglo XX, este afán de conocer las culturas precolombinas antillanas fue fundamentado por estudios programáticos de Smithsonan Institution, de la Academia de Ciencias de New York y otros centros dedicados a los programas de conocimientos académicos de la idea imperialista norteamericana de consolidar el estudio total del Caribe tanto insular como territorial, considerados como su área de dominio.
Como resumen arqueográfico en esta parte del trabajo de investigación arqueológica temprana afloran dos líneas de ocupación: 1- La de los grupos recolectores, más antiguos representados por utensilios de concha, hueso, madera y fósiles, caracterizados por su dieta fundamentalmente recolectiva, y sus sitios de explotación serian la línea fundamental que indicaría su modelo o modo de vida. Y 2- La de los grupos agricultores, tempranos, con cultivo incipiente, aun utilizando cierta recolección, y desarrollando los cultivos de tubérculos como yuca, mandioca dulce y amarga, liren, batata, yautía, y frutales diversos traídos de sus lugares de origen, desde el momento mismo de su transito por el arco antillano, primero de un modo experimental y luego de modo definitivo en relación con desarrollo tribal ligado a los grupos llegados, desde el siglo III antes de Cristo desde las costas venezolanos- Vale señalar que los primeros grupos pre—agrícolas comenzaron a llegar desde el 4000 y el 5000 antes de Cristo desde puntos como el área de la actual Belice, y desde la desembocadura del Orinoco sirviendo de puente a sociedades tardías como los llamados galinas o caribes, que fueron los grupos tribales mas tardíos, como serían los ciguayos y macurijes de la parte de la costa nororiental y noroccidental, conocidos como hablantes de dialectos diferentes del llamado “taíno”.
Vale señalar que no existen datos definitivos de un tránsito que no sea la costa norte de Centroamérica, poco documentado y la costa sureste de Sudamérica (Venezuela y Guayana), mejor documentado.
3- En cuanto a la dieta, hay una profunda diferencia, si diferenciamos los alimentos de ambos grupos. Debido a la mayoría de los recolectores usando “como almacén” el litoral, los manglares, y la cacería marina, sus instrumentos tienen relación con el trabajo marino: puntas de proyectil, azuelas, fuego, y artefactos mas ligados al mar como canoas y remos recuperados, morteros de piedra para moler semillas y afines.
4 En el caso de los agricultores, la mayoría de ellos de lengua ARAHUACA O ARAWAC, debido al dominio medioambiental que caracteriza su migración, la dieta tiene un novedad importante porque entre ellos el manejo de la agricultura permite el uso extensivo o concentrado del terreno, y la producen volitiva, variada y prolongable que no conoce el recolector, cuya vida era nómada y semi nómada.