Santo Domingo 19°C/21°C clear sky

Suscribete

ORLANDO DICE

A río revuelto…

La marcha atrás en casi todos los países del mundo y el endurecimiento del confinamiento por el Covid-19, demuestran que las respuestas sanitarias no fueron las adecuadas.

Las precariedades, las fallas, podían explicarse en naciones del Tercer Mundo, pero no del Primero, y se tiene que en principio y ahora las llamadas potencias fueron desbordadas.

Las mismas que investigaron, se suponía que a fondo, y crearon vacunas de cuya eficacia no se duda. Aunque con las mutaciones del virus se vuelve o se sigue en lo mismo.

La OMS se dedicó desde el principio a dar palos a ciegas, y un día calmaba la población del mundo, y al siguiente la alarmaba.

Fue evidente que nunca tuvo control de la situación, como sí había sucedido en el pasado con epidemias, e incluso pandemias.

La OPS tampoco cubrió su parte, y fácil de entenderlo. Como dependencia no puede manejarse mejor que el organismo principal.

El gobierno dominicano no puede inventar en ese campo, y los procedimientos y protocolos que aplica no son propios, sino disposiciones foráneas. Lo que recomienda la OMS o aconseja la OPS. El remedio universal es el confinamiento y se atribuye la nueva gravedad del caso al no cumplimiento del encierro.

Habría que ver, pues aquí no, pero sí en Europa, o particularmente en Inglaterra, el rebrote se debe a una nueva cepa.

Siendo así, de réplica en réplica se llegará a una situación de desgracia universal, si es que ya no es ese el nivel de agobio.

El Presidente clamó en el desierto y declaró cansancio colectivo, mientras grupos sediciosos en los barrios y pueblos resisten – deportivamente -- las medidas oficiales.

Nadie lo proclama, pero más que evidente que esos núcleos se creen con el derecho, y de seguro con rango constitucional, para hacer del toque de queda un desorden.

El gobierno, aunque amenace, no puede llevar la represión a un nivel incompatible con el mandato democrático, y a falta de control social y con evidentes fallas sanitarias, la insurgencia de la calle crispa la gobernabilidad.

A río revuelto, ganancia de pescadores.

Tags relacionados