La Inmaculada

Hoy celebramos en el universo entero la fiesta de María como mujer inmaculada. Actualicemos hoy este mensaje.

Una de las metas que tiene la humanidad, una de las misiones o de las tareas que tiene, es superar el mal que existe. La falta de ética, los males que siembra y las cosechas que tiene, eso le llamamos desde el punto de vista cristiano “el pecado”.

María se nos presenta como la meta a la que tenemos que llegar y ella, sí, es la “sin pecado”, la que está limpia. La meta de la humanidad es que todos seamos inmaculados.

Algunos me dirán: “Pero eso es un sueño imposible de conseguir”. Siempre podemos estar invitados a la tentación. Somos libres, pero arrastramos con nosotros una serie de males sociales individuales que hemos de superar.

Es una meta llegar a ser inmaculados para que podamos más fácilmente ejercer nuestra libertad, sin las presiones que tenemos del mal, del pecado, personalmente y socialmente. María es meta de la humanidad.

Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.