Dopaje irresponsable

Siempre hemos señalado que en República Dominicana el siste­ma de reclutamiento de pelote­ros se ha convertido en un ce­menterio de menores, víctimas de la voracidad de buscar dólares en per­juicio de la educación y la salud de nuestros niños peloteros.

Nada más irresponsable y vergonzoso que la práctica aplicada en la industria del béisbol dominicano, por la forma irregular e ilegal de algunos programas que solo culpan a los bus­cones y escuchas independientes, muchas ve­ces subvencionados por ellos mismos, para retener a esos niños inmaduros física y men­talmente, con miras al sueño de una firma.

Es injusto acusar solamente a los peloteros de doparse, limpiándose las manos como Pi­latos y abrir así la boca para tildar de vergon­zosa nuestra imagen beisbolera, cuando son los primeros estimuladores del dopaje y la de­serción escolar.

Lo que da vergüenza es que el Estado lo permita sin un sistema de consecuencias me­diante legislación y no entregar sus niños pe­loteros a esta práctica indecorosa y criminal.

La razón del dopaje es el resultado de un sistema que lo induce y estimula.

Protejamos a los menores prospectos del dopaje en la nueva Ley del Deporte.