CONTANDO LOS HECHOS
Transparencia Vs Impunidad
Señalaba el tuitero Teobaldo Durán, recientemente, que de ahora en adelante las personas que aspiraran a una posición en el sector público tendrían que estar dispuestas a ir al parque Independencia, desnudarse y mostrar los pliegues y estrías, que hoy en día la mayoría del público reclama. Yo le contesté en otro tuit que estaba de acuerdo en que esa es la situación ya que cualquier hecho que se cometa corre el riesgo de ser descubierto en poco tiempo, casi en un ciento por ciento.
Si revisamos la cultura dominicana inmediatamente después de la dictadura hasta el día de hoy, encontraremos que nos hemos acostumbrado a recibir sueldos bajos de parte del Estado y a “buscarnos” lo que falta, de cualquier manera posible, y hemos hecho una maestría en esa especialidad. De ahí que le resulta muy difícil a un presidente, como en este caso Luis Abinader, cumplir con el propósito de lograr la transparencia y eliminar la impunidad. Hay algunos pasos, como la independencia del Ministerio Público, que ya se han iniciado y se esperan otros inminentes. Luce que el Señor Presidente va a necesitar no solo a sus más capaces técnicos en economía y ámbito jurídico, sino también a uno que otro zorro político con sobrada experiencia que lo ayude a transitar el tortuoso camino por delante ante adversarios que tienen sobrada capacidad de respuesta.
No olvido que cuando fui nombrado Secretario de Estado de Turismo por el Presidente Antonio Guzmán, se me acercó un gran amigo para felicitarme y me dijo: Ellis esta es tu gran oportunidad tienes que hacerte. No seas pend….este es el momento. Yo sólo me sonreí sin contestar, esa ha sido la cultura. A los pocos días pasé por la experiencia de varias ocasiones de personas conocidas incluyendo algunas de las que yo no esperaba ese tipo de comportamiento, que me hicieron ofertas sumamente tentadoras. Recuerdo que a uno de ellos le contesté, mira fulano, además de que realmente no hay dinero, cuando miro el techo de mi oficina no solo veo el cielo raso, sino que lo veo incrustado como de mil ojitos que me están mirando para acusarme de cualquier acto improcedente. La persona se sonrió y no dijo más nada.
Siempre he dicho que el ejercicio del poder brinda muchos valores y oportunidades. Aun me llaman en ocasiones para trabajos, por haber sido Secretario de Turismo.