¿Se terminó la cuarentena?

Imaginen esta escena: un colmado ambientado a ritmo de una bachata, varias mujeres y hombres tomando cerveza, unos cuantos niños alrededor jugando como cualquier día antes de la pandemia.

No sé si llamar a esto irresponsabilidad o falta de conciencia. Al ver ese grupo de personas en una conversación muy amena, otros cantando la bachata de Romeo, sin mascarillas y muy de cerca, pensé que todo había terminado.

Me pregunté si ya no había más personas contagiadas con el virus, si las estadísticas habían bajado, si la cuarentena se terminó, si extender el toque de queda hasta las 7:00 de la noche significaba volver a la normalidad de un sábado cualquiera, con vestimentas de fiesta.

Esos eran los adultos, visibles a los niños que también se juntaron a jugar sin ninguna protección, porque todo está bien.

El quédate en casa, cuida a los tuyos, se prudente y otros llamados de las autoridades parecen caer en oídos sordos y eso es lo lamentable en un país que lucha cada día para salir de esta situación.

Las dificultades que han surgido en el día a día del pueblo junto con el virus han sido muchas, y la falta de conciencia no ayuda, sino que las aumenta.

Nos queda a todos orar por esta nación, clamar para que este mal pase y que deje en nosotros el ser mejores y más responsables.