Extraordinario el resultado en la lucha contra el Covid-19

Durante la emergen­cia epi­demio­lógica nacional creada por el Coronavirus de Wuhan, el ministro Sánchez Cár­denas ha mostrado la dili­gencia y eficiencia con las que puede actuar un fun­cionario movido por de­beres organizacionales, razones de servicio y con­vicciones personal y apa­sionadamente interiori­zados.

Las estadísticas infor­madas en sus compare­cencias diarias suplen el balance de la pandemia, mostrando su determina­da voluntad: hacer inclu­so más allá de lo posible. Triunfar en la lucha con­tra la pandemia, también desde la adversidad, sin ceder un ápice en el ejer­cicio de las exclusivida­des organizacionales. Los datos ministeriales dan cuentan del nivel de rigor con que está satisfacien­do los reclamos y deman­das. Cómo en esta lucha Salud Pública se anota lo­gros extraordinarios.

Lo resaltan las esta­dísticas: logros extraor­dinarios en la estrategia nacional contra el coro­navirus. Primeramente, en lo importante, la tasa de recuperados: las per­sonas infectadas que han logrado —gracias a sus sistemas inmunes y a las terapias médicas— ven­cer el coloniaje de sus or­ganismos por el SARS-CoV-2.

Respecto a la situa­ción que presentó el Bo­letín 48, del 05 de ma­yo 2020, el boletín 61, emitido trece días des­pués (mayo 18), revela el fuerte indicador de es­ta estrategia rotunda: en tanto desde el inicio del conteo la incidencia dia­ria de casos fue +18.14% que la de mayo 05, los ca­sos confirmados estaban 50.14% por encima, con +52.29% de nuevos in­fectados. Esto se corre­laciona con la toma de +65.13% muestras en el periodo. Igualmente, los aislados en hospitales au­mentaron +27.35% en tanto los recluidos en sus viviendas caían -18.44%.

Dicho de otro modo: mientras la incidencia, el número de casos diarios, la toma de muestras y los aislados en hospitales crecían en orden de 0.50, 0.52, 0.65 y 0.27 ve­ces, respectivamente, las muertes nacionales por Covid-19 también lo ha­cían en 21.82% (0.22 ve­ces), pero —es lo que se resalta— la tasa de leta­lidad descendía, en esos 13 días, en 18.86%, al pasar de 4.11% a 3.34%.

También caían los ais­lamientos domiciliarios: en -18.44%, junto al cre­cimiento de incidencia y nuevos casos diarios.

Se impone una pregun­ta: si en esos trece días los aislados en hospitales crecieron +27.35% y los recluidos en sus hogares, contrariamente, cayeron en -18.44% (45.79% me­nos que aquellos), ¿las ci­fras dicen que la baja en la tasa de letalidad del Covid-19 en el país es­tá siendo acreditada por la reclusión domiciliaria más que por la hospitala­ria?

El incremento de la ta­sa de recuperación de esos trece días (+2.41 veces) empujó la tasa de letalidad a la baja en 18.86%, corroborando la significativa estabilidad del número de fallecidos.

Desde el inicio del con­teo, este indicador pro­media 7.44 muertes dia­rias. Estableciendo una correlación estable con los días totales antes que con el total de casos.

Así, la evolución del Covid-19 en el país per­mite apreciar lo extraor­dinario en la estrategia del Ministerio de Salud: en tanto en 13 días la in­cidencia creció 18.14%, las recuperaciones fueron +168.43%.

Logros necesarios para allanar el camino hacia la apertura económica gra­dual a la que el país de­be ingresar con disciplina y redoblado comedimien­to, recordando que Salud Pública anunció la llega­da de la “inmunidad de rebaño”..