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COLABORACIÓN

La deuda pública dominicana: Realidad o ficción

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José Lois MalkunSanto Domingo

La deuda real no está disponible. Pero veamos lo que dicen las cifras oficiales.

Comencemos con el Sector Público no Financiero (SPNF), que solo incluye deudas del gobierno central.

Al cierre del 2019 la deuda del SPNF cerró en US$35,942 millones. A finales del 2018 fue de US$32,158 millones aumentando en 12 meses US$3,794 millones.

Si nos vamos al 2012, cuando se inició la gestión del presidente Medina, la deuda a diciembre de ese año era US$19,103 millones. ¿Cuánto creció la deuda del SPNF en estos últimos 7 años? US$16,839 millones, unos US$2,405 millones por año.

Pero hablemos ahora de la Deuda Consolidada que incluye el Banco Central.

Esta cerró en el 2019 en US$47,860 millones. O sea, que la del Banco Central representó US$11,918 millones y la del SPNF US$35,942 millones

Si volvemos al 2012, la deuda consolidada registró un total de US$27,131 millones y 7 años después US$47,860, creciendo en ese periodo en US$20,729 millones, equivalente a US$2,961 millones por año.

Para el 2020 la deuda consolidada aumentará en unos US$3.100 millones con lo que el presidente Medina terminará su mandato endeudando al país en US$23,829 millones, casi US$3,000 millones por año.

La deuda consolidada representa un 53.3% del PIB.

Pero hay un problema más grave. Un 21% de los ingresos tributarios son para pagar intereses de la deuda y eso representó en el 2019 un total de erogaciones por RD$148,817 millones (un poco más de US$3,000 millones ajustado a la tasa de cambio). O sea, solo en intereses estamos pagando el equivalente al aumento de la deuda anual.

La deuda publica consolidada en los últimos 7 años aumentó un 75% con una tasa anual de 9.71%, muy por encima de la tasa de crecimiento de la economía que fue de 6%.

¿Pero es esa la deuda real? Esperemos que no repitamos lo de Grecia cuyas cifras oficiales ocultaban millones de euros adeudados enterrados en una fosa del mar Egeo.

Es la gran interrogante porque hay muchas deudas flotantes que no se transparentan o se ocultan como deudas privadas cuando son realmente pública. Después del 16 de agosto los dominicanos conocerán toda la verdad.

Con ese astronómico endeudamiento hasta chochueca hubiera aumentado los ingresos familiares, mientras los multimillonarios y corruptos se multiplicaban como conejos.

¿Y quién pagará esa deuda? Lo más jodidos, como siempre sucede.

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