Ola de violencia

“...mataron tres más, y en siete días van...”. La presentadora de noticias de la televisión no ocultaba su exaltación y hasta morbo al reseñar los episodios que disparaban las estadísticas de los casos de asesinatos de mujeres, a manos de sus maridos y/o ex parejas.

Los feminicidios ganan mucha prensa. 62 se han registrado según la Procuraduría. Hay un seguimiento día por día de parte varias organizaciones, la mayoría de ONGs que reciben fondos públicos, que se definen como feministas y/o de denuncia y lucha contra la violencia contra la mujer..

Así como maridos o exparejas celosos han asesinado siete mujeres en los últimos días, tres hombres han muerto violentamente a manos de sus compañeras, una joven fue asesinada a puñaladas por otras dos en un pleito; dos mujeres más, extranjeras, murieron violentamente en Puerto Plata y San Cristóbal; pero más aún otras cinco personas murieron en asaltos, pleitos de barrios y tiroteos entre bandas de asaltantes y de drogas. Esto indica que estamos en una nueva espiral de violencia. No es responsabiliad del gobierno. Es una responsabilidad de la sociedad en pleno, porque los picos de violencia obedecen a complejas situaciones multifactoriales y multisectoriales, comenzando desde la educación hogareña, de familia, las condiciones socioeconómicas de las clases media y bajas, las influencias violentas que exporta el narcotráfico. Por ello, si seguimos dando la espalda y derivando esos casos de violencia a la responsabilidad de las autoridades y/o sobre la base de que la violencia es “un problema de los demás”, será muy dificil y de alto costo social, poder revertirlo.