Realidades electorales

Mientras la gente se entretiene con el ‘pleito de comadres’ de Leonel y Danilo -discursos y contradiscursos, en que ambos se sacan los ‘trapitos al sol’ y descargan en público sus rencores y traiciones-- y se pretende crear la sensación de que vivimos una ‘crisis política’.

La población, sin embargo, continúa su día a día, su cotidianidad, sus luchas por sortear los retos que nos imponen las tensiones de los vaivenes económicos y las presiones sociales.

Las primarias del 6 de octubre son un hecho consumado. Discurso de desahogo y justificación, de un lado. Discurso de respuesta y explicación sobre las relaciones entre ambos. Todo en apenas 19 horas. Leonel justificó su salida del PLD. Danilo se desquitó por las desconsideraciones que le propiciara cuando Fernández le echó a la sociedad encima con el tema de la reforma a la Constitución.

Se habla de intentos de construir una coalición de oposición con la meta de sacar del poder al PLD, a Danilo. Puja Leonel, de su lado. Puja Luis Abinader, en otro extremo. Ambos enfrentados soterradamente por quien será el ‘líder’ de la oposición al gobierno y su partido.

Y como no creo en los ‘desinteresados’ y los ‘patriotas’ en la política moderna, ese es el elemento que más los aleja. Minoritarios -como el PRSC, la FNP, el BIS- se alían con cualquiera porque su destino es el mismo de siempre, ser bisagra para tratar de sobrevivir más allá de las elecciones. Los plazos legales, las decisiones de los tribunales serán, al final, los elementos decisivos.