Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

ORLANDO DICE...

Estudio obligado

Los encartes publicados por la Junta Central Electoral en el Listín de ayer, de las votaciones en las primarias abiertas y cerradas del PLD y PRM, debieran estudiarse.

Por los interesados o votados y por los observadores del acontecer político nacional. Desde ya podrían hacerse apropiaciones y determinarse posibilidades.

Las internas no mueven el voto con la misma fuerza que las nacionales, pero si permiten proyecciones, y estas pueden considerarse como partido y como candidato.

El que ganó, ganó, en el nivel que fuera, y figurará como candidato en la boleta del partido o de la coalición que lo favoreciera.

El rendimiento recién es un punto a tener en cuenta para calcular su desempeño futuro en una consulta de mayor aliento.

No es lo mismo ser candidato a senador, diputado, alcalde y regidor que lograr la posición en una confrontación con sus adversarios de fuera.

La pobre votación de un nominado del PRM no puede excusarse en que la consulta fuera cerrada, aun cuando sea un elemento de interés.

En el caso de un postulante del PLD el rigor debiera ser más acentuado, pues como su escrutinio era abierto, pudo agenciarse más apoyos.

Hablan de la participación en primarias de un 30% y que en las elecciones generales andará por encima de un 60%, esto es, el doble.

El esfuerzo para ser competitivo habrá de redoblarse, e igual los recursos. Cuando se averigua, se tiene que cada cual dio hasta el agotamiento.

Habrá más votantes, claro está, pero solo para los aspirantes que sepan buscarlos y dispongan de medios suficientes.

La votación de las primarias -en sentido general- no alienta, más bien desalienta. Aunque el tenerla a mano en los encartes de la Junta Central Electoral será de suma utilidad.

En especial para el partido que sabrá por adelantado que sus boletas en los niveles medios y bajos no garantizan poder en las cámaras y en los municipios.

Los senadores y los alcaldes van a tener que guayar la yuca en la tabla, sin guayo, al eliminarse el llamado voto de arrastre.

Guerra avisada, pues...

Tags relacionados