La JCE y el reto

Más allá de los reclamos y la denuncia de fraude que hace el exprecandidato presidencial, del oficialismo, Leonel Fernández, y cuyas pruebas deben ser suministradas y respondidas por la Junta Central Electoral (JCE), el ejercicio comicial intramuros del pasado domingo fue satisfactorio.

La asistencia, participación, orden y entusiasmo de mucho más de dos millones de ciudadanos, entre miembros y no inscritos de los partidos de la Liberación Dominicana (PLD) y Revolucionario Moderno (PRM), así lo verifica. Y es que al margen de los innegables puntos a fortalecer reflejados en este inédito y complejo ensayo que involucró a 11,427 aspirantes, entre candidatos presidenciales, congresuales y municipales, la logística, accesibilidad, el despliegue tecnológico, la seguridad y la prontitud en la entrega de los resultados, llenaron las expectativas de la ciudadanía. El que antes de que cayeran los rayos del sol ya se tuvieran los resultados de más del 50 por ciento de las 7,372 máquinas de votación, repartidas en 3,890 recintos electorales a nivel nacional, explica de manera fehaciente las conveniencias y eficacias del voto automatizado.

Salvo los incidentes aislados que lamentablemente siempre ocurren en este tipo de eventos donde las pasiones se desbordan, es indiscutible que, con su comportamiento y sentido cívico, tanto la población como la JCE, estuvieron a la altura de las circunstancias.