Mañana, ¡el libro de Johnny Abbes!

Mañana, a las 7:30 de la noche todos estamos convidados a estar presentes en la Sala Juan Bosch de la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña. El asilo metódico de la cultura, erigido en una hermosa edificación de anaqueles y autores, abre sus puertas al trepidar de la memoria y la historia. Es más que la puesta en circulación de una obra, es la búsqueda narrativa más intensa de un personaje fundamental para entenderlo y atraparlo, hundiendo el escalpelo de los datos, la investigación y el telón ficcional de la imaginación en el cuerpo viviente del más temible matón de la Era de Trujillo.

Poca gente sabe que Johnny Abbes García, apenas ejerció el poder absoluto de la dictadura durante tres años y algunos meses, para imprimirle a ese gobierno absoluto, la fuerza demoníaca del crimen a gran escala, del asesinato contumaz, del terror que paralizó el alma nacional, que invadió los hogares y convirtió a una parte de la sociedad en cómplice de la delación, prisionera del miedo y la sumisión. Trujillo ejerció el poder ahogando en sangre toda disensión desde que asumió su mandato en 1930, fue implacable con sus adversarios y fundamentó su obra de Estado sobre la base del pensamiento único y el culto desmesurado a la personalidad. Pero no fue hasta que el sujeto llamado Johnny Abbes García, asumió el control de la Seguridad Nacional, en 1958, que su dictadura violentó todos los códigos humanos, penetró en los hogares, fragmentó la familia dominicana y nos hizo a todos, rehenes de su autoridad desmedida.

Toda la vida de Johnny constituye un misterio no resuelto. Figura anodina de la ciudad pequeña, contertulio de peñas deportivas, cronista de eventos y dirigente del Comité Olímpico, fue agraciado por Trujillo sin que mediara entre ellos ningún vínculo afectivo ni intermediario puntual. Johnny organizó las más increíbles aventuras en el ámbito internacional contra mandatarios democráticos y opositores a la dictadura de Trujillo.

Las pruebas materiales fueron determinantes, en Guatemala donde todavía está abierto el expediente que lo incrimina en el asesinato del presidente de ese país en 1957, en México donde cometió fechorías que costaron la vida a varios exilados así como al escritor español José Almoina, en Cuba donde estuvo involucrado en asesinatos, en Venezuela donde dirigió el intento de asesinato del presidente Betancourt, en Honduras donde dirigió el intento de muerte del presidente Ramón Villeda Morales, y en una abortada invasión trujillista contra Fidel Castro en agosto de 1959. Todavía hoy su nombre figura en los expedientes a procesar en esos países.

Mañana, Johnny Abbes habla hasta por los codos en esta obra, no se arrepiente de nada y se burla de sus supuestos sepultureros. Todo narrado en primera persona. Los datos son ciertos, apegados a un itinerario espeluznante de sobrevida y misterio. La versión haitiana rueda por el suelo. A los 94 años, este huésped siniestro estará presente entre nosotros.