Haití necesita ayuda (IV)

Una de las soluciones que pudiera tener la informalidad y los riesgos que existen en la frontera dominico-haitiana de 376 kilómetros de longitud de norte a sur, es la llamada Iniciativa Laredo, que tiene como plataforma el modelo fronterizo entre el Estado Nuevo Laredo y el Estado de Laredo, en la frontera sur México-Estados Unidos. Laredo, es uno de los puntos de mayor tráfico en materia de comercio entre Estados Unidos y México, además, de ser un atractivo centro de compras para ciudadanos mexicanos que pernoctan en dicha zona. El punto lo separa un puente binacional que sirve a los dos países cuyo comercio bilateral es el tercero más grande del mundo, y el cual es amparado por un Acuerdo de Libre Comercio, el cual participa Canadá. La República Dominicana ha sido invitada a conocer las ventajas que representa la Iniciativa Laredo ente bajo la coordinación de la Universidad Texas A&M. Dicha Iniciativa persigue ayudar a la modernización de la frontera dominico-haitiana implementando un plan de desarrollo para aumentar el comercio binacional, promover inversiones conjuntas, mejorar la calidad de vida de los habitantes fronterizos y fortalecer la seguridad de dicho territorio de acciones como, el trasiego de drogas, armas, tratas humanas y contrabando de mercancías. La modernización del tramo fronterizo con Haití, es un asunto vital para normalizar una situación que lleva años desenvolviéndose en la informalidad y alta porosidad que caracteriza a dicho espacio intrafronterizo. El modelo de la Iniciativa Laredo, podría ser el punto de partida para frenar la migración masiva de los haitianos que huyen de la inestabilidad política que acosa al Estado haitiano y de las pocas oportunidades económicas que se derivan de estos factores. No le demos más vueltas al problema, y la Iniciativa Laredo, puede ser una solución al régimen de administración fronteriza que amenaza la desnacionalización del 22% del territorio dominicano.