El hombre casado

Es interesante constatar cómo muchas empresas modernas buscan para ser gerentes hombres fieles a una sola familia, a sabiendas que un hombre que anda con otras mujeres y crea otra familia tiene la mente y el corazón divididos. Sus funciones no las podrá realizar bien como gerente y podrá corromperse para sostener esa situación.

Lo que se dice de los empresarios hay que decirlo de los políticos que tienen varios hogares: está dividido, no atenderá al bien común como debe ser, y todo hombre, todo político que anda de esa manera, terminará fácilmente corrompiéndose para poder atender a varias familias.

Lo que se dice del hombre casado, que no divide su corazón, vale para el gerente, para el político, para todo aquel que dirige. Esto no solamente son los principios éticos que lo mandan, sino la experiencia misma de la vida diaria.