Los alejados

¿A quienes me refiero como los alejados? Se trata de aquella gente que no ha encontrado un sentido pleno a la vida, conociendo a un Señor de Victoria que no escatima esfuerzo para hacernos sentir las primicias de una santidad sin macula.

Los alejados no perciben que un Dios de bondad tiene la capacidad de perdonar todas las faltas cometidas que transgreden su ley. Que no observan, toda la belleza que hay a su alrededor, creación que ha sido dada para que la disfrutemos en paz y sin prejuicios.

Estos alejados, tampoco aprecian los actos de misericordia que ocurren cada día, produciendo una esperanza sin límites y que alcanza a todos los confines de la tierra. Entiendo, que el alejarse de la gracia divina es una forma poco inteligente de no buscar la fuente de la verdadera sabiduría.

De este modo, el alejamiento de Aquel que lo puede todo, constituye un acto de soberbia, pues se cree que es posible solucionar los problemas por cuenta propia. Pero es esta reflexión, existe una circunstancia atenuante. Consiste en que muchas veces los alejados, actúan de este modo porque han visto como los que se llaman “escogidos” representan muy mal su papel de cercanos de Dios.

De modo, que los alejados pueden volver, la puerta grande está abierta a ellos, sólo tienen que dar el primer paso, y les aseguro que su vida cambiará, y encontrarán una paz que no tiene otra igual.