Que no se detenga

La tercera es la vencida. Dice el refrán. La semana pasada en Tamayo se reiniciaron los trabajos de construcción de las calles, por tercera vez en menos de 4 años. Esta vez no se iniciaron por las simples gestiones de quienes hemos impulsado esa conquista desde la capital para que esos trabajos concreticen. Ahora la reparación y asfaltado de calles, se iniciaron luego que la población decidiera que era imposible seguir viviendo en un pueblo con calles tan destruidas, sin drenaje pluvial y con callejones convertidos en caminos vecinales, con la diferencia de que estos se encuentran adornados con casas habitadas por seres humanos expuestos al polvo y la acumulación de agua por falta de asfaltado y drenaje pluvial.

Luego de las protestas se fijó un plazo a las autoridades y precisamente el día que se cumplió, llegaron los equipos. Se inició el asfaltado en aquellas vías que están sólidamente construidas, que eran apenas dos calles de corta dimensión. Luego los equipos fueron llevados al cuartel policial, donde aún están, a la espera de que el cabildo avance la construcción de las aceras, contenes y adecuación de las demás calles del pueblo. Esta parte ya se ha cumplido en barrios como La Altagracia, La Sombra, San José, El Cacique y Hato Nuevo. Labor que se ha hecho con los pocos recursos que recibe el municipio. Esos lugares esperan que desde este lunes comience el asfaltado. Sin embargo existen dudas de ese reinicio, por la escasa presencia de funcionarios del ministerio de Obras Públicas en la zona.

Pero, que sepan las autoridades, que esta vez, será difícil que se lleven los equipos, no porque no lo deseen los funcionarios responsables, sino porque el pueblo no está dispuesto a permitirlo. Hay que estar atentos, día y noche, para evitar una nueva burla.

El cabildo del municipio, con reducidos ingresos asumió el compromiso de construir las aceras, los contenes y el relleno de las vías. El trabajo se ha estado realizando sin pausa y para eso se ha contado con la colaboración de algunos empresarios de la comunidad que han donado cemento para dicha labor. Eso ha permitido el avance de los trabajos en las calles de los barrios, pero si Obras Públicas no inicia de inmediato su asfaltado, la inversión del cabildo se iría al desagüe si se produce un tiempo de lluvia o pasan los días y se sigue transitando por ellas en ese estado. Eso sería trágico, porque ese cabildo no cuenta con recursos para reinvertir en las calles ya preparadas.

No hay argumentos ni motivos para que se retrasen por más tiempo los trabajos de asfaltado de las calles que han sido acondicionadas por las autoridades municipales. No queremos más promesas del ministerio para dejar POR LA MITAD los trabajos en el HOY abandonado municipio de Tamayo. Que no se detengan NI UN DIA MÁS.