Los salmos y la justicia (2)

Hoy hacemos la segunda entrega de este tema de los salmos y la justicia y los invito inmediatamente a ver, a repasar el hermoso salmo 1, y recuerden que me gusta decir que aunque uno no sea cristiano ni lea la Biblia por la fe, la debe leer por literatura, como un libro grande de sabiduría, el libro más grande de sabiduría y todos, se lo repito de corazón: hay personas que leen la Biblia no porque creen en Dios, sino porque creen en esa sabiduría y en ese saber. Este salmo 1 trae estas frases, estos versículos, que son los últimos de este salmo: “Los malvados -aquí en la República Dominicana se dice los corruptos- no soportarán el juicio, aunque no hayan sufrido un juicio durante su vida, ni los pecadores podrán aguantar con paciencia a los que son justos, les resultan molestos, pues Dios conoce el camino de los justos, pero el camino de los malvados se extravía”. Es una frase que parece repetitiva, se parece tonta, pero los siglos, aparte de las enseñanzas bíblicas, nos han enseñado que los justos tendrán un juicio siempre, y lo repetiremos cien veces, nunca lo podemos olvidar. Yo sufro muchas veces -se lo digo de corazón-, por los que han cometido actos de corrupción, cómo son llevados más tarde o más temprano al juicio y cuánto sufre su familia y sus hijos esto: “mi padre era un corrupto, era un injusto, y yo sufro esas consecuencias y no me siento orgulloso de él”.

Ese salmo 1 nos hace volver la mirada sobre ese camino que se puede seguir, pero que termina mal.

Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.