UN MOMENTO
Invasión y desocupación
No puedo negar que una de las realidades históricas que me marcan, me enseñan, no solamente a mí, a todos, son las invasiones que hacen los pueblos, invasiones que se realizan y terminan en desocupación.
El día 12 de julio, los dominicanos recuerdan, celebran, la desocupación de las tropas norteamericanas, esas fuerzas armadas de Estados Unidos que nos ocuparon y tuvieron que irse.
Lo mismo nos ha pasado otras tantas veces cuando nos han ocupado las fuerzas haitianas -celebramos su desocupación el 27 de febrero de cada año-; la ocupación de las fuerzas españolas, cuya fiesta de desocupación la celebramos anualmente el 16 de febrero.
Los dominicanos -pueblo pequeño- han aprendido que son ellos los que tienen que dirigirse. Además, eso es lo que quiere la historia, los pueblos y Dios en último término.
Por eso celebramos la desocupación, y los pueblos que invaden, deben aprender que más tarde o más temprano -como pasa en la historia- su invasión es una equivocación y termina en la desocupación.
Es una gran lección de la historia y una gran lección para nosotros, y los dominicanos hemos de aprender que cualquiera que nos invada tiene que desocupar.
Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.