SONDEO
Aduanas
Después de un desempeño dinámico, que identificó diversos nichos de negocio y que en poco tiempo habló con resultados, lo menos que pudo haber pensado el anterior administrador del banco del Estado, Enrique Ramírez Paniagua, es que en la conformación de un nuevo equipo para su segundo mandato el presidente Danilo Medina lo iba a llevar a la Dirección General de Aduanas. De banquero a recaudador, es como para que el primer sorprendido con la designación fuera el funcionario nativo de San Juan.
Y como los presidentes siempre tienen sus planes o sus razones especiales para mover del tablero a fichas claves o de confianza en sus mandatos, es probable que el experimentado banquero y ahora recaudador del Estado, viera en la decisión del gobernante y amigo una prueba de confianza depositada en su persona, y que, como soldado de la causa gubernamental morada, también lo asumiera como un gran reto personal en su paso por la administración pública (a Enrique era a quien me refería hace unos días, que en conversación particular expresaba que los funcionarios están “para resolver, para ayudar al Presidente, y no esperar que sea éste el que tenga que resolver y disponer todo para que las cosas se hagan”). Muy de acuerdo con esto, aunque, en la práctica, hay funcionarios públicos que se manejan como si los compromisos del Presidente solo fueran de este y no mueven una paja, a menos que reciban la orden o una “línea” directa del gobernante (¿?). Con respecto al gran reto frente a Aduanas, ya no solo con el aumento de los controles y de las recaudaciones -de los que ya hay señales de mejoría- parece que sería mayor de lo esperado, a juzgar por algunas “campañitas” mediáticas que ya se vienen orquestando contra el funcionario, sin dudas que por los intereses afectados por las últimas medidas.
El descubrimiento de varios paquetes contentivos de armas y de municiones, así como del intento de algunas empresas de introducir unas mercancías por otras en perjuicio del fisco, es muestra evidente del aumento de los controles aduanales, cargando pesado y no importando “pisar algunos callos”, lo que, sin lugar a dudas, comienza a traer reacciones para las que habrá que estar preparados.
Nota: por viaje del autor, Sondeo tendrá algunas ausencias.
