Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

FUERA DE CÁMARA

¿Una premonición ominosa?

Es probable que la única coincidencia de todos los grupos e individualidades de la oposición sea que si no se unen los batirá el Partido de la Liberación Dominicana... como si se tratara de una sentencia ominosa que debería comenzar a preocupar a sociólogos y “cientistas políticos” que tanto han cacareado la llamada “dictadura de partido”. Porque se trata de un propósito difícil de lograr en las circunstancias actuales, con el principal y más viejo partido dividido y todos buscando lo mismo: el poder. El PLD ha ganado limpiamente las últimas cinco elecciones, tres de ellas presidenciales, con más del 50 por ciento en primera vuelta, y faltando apenas 15 meses para la próxima consulta no se vislumbra la alternativa para evitar que se repita ese fenómeno electoral. Empezando por el Partido Revolucionario Dominicano que ni siquiera unido-- a excepción del año 1962, con Bosch--, ha llegado jamás al 50 por ciento de los votos; en el 2000, con todo a favor, se quedó corto y tuvo Danilo Medina que renunciar a la opción de la segunda vuelta para que Hipólito Mejía accediera al poder. Dividida más que nunca, la oposición no es alternativa ni siquiera frente al candidato peledeista más vulnerable, que en la presente coyuntura sería el señor Montás, para citar un ejemplo inverosímil. De ahí las voces tan disimiles reclamando un entendimiento de los partidos, grupos y líderes de la oposición para enfrentar una candidatura del PLD que aparentemente encabezará Leonel Fernández, sin descartar todavía que Danilo opte por la reelección, en cuyo caso se alejaría mucho más cualquier otra posibilidad.. Miguel, Hipólito, Luis...Miguel Vargas es la opción opositora viable para entrar a un balotaje después del gran esfuerzo unitario del PRD, en cuyo caso resulta impensable que reciba el apoyo de Mejía, resentido todavía por los resultados electorales de 2012. Además, después del dieciséis Hipólito no tiene futuro político. Con Abinader sería distinto... Un “entendimiento de doble vía” entre Miguel y Luis podría concitar el interés de una franja opositora sin identificación partidaria que busca la brecha para colar una opción con posibilidades. Como “entendimiento de doble vía” se considera un pacto para reciprocarse apoyo en una segunda vuelta. Es decir, si el PRD queda en segundo lugar y hay segunda vuelta, recibiría el respaldo del PRM; si ocurre a la inversa, entonces el PRD apoyaría a Abinader. En ese escenario podría ser factible que ambos agrupamientos lleven candidaturas comunes a nivel congresual y municipal, que es la “alianza mínima” que sugiere Hatuey De Camps para evitar que la oposición pierda espacio en el Congreso y los ayuntamientos. Dos viejos refranes...El propio Hatuey lo diría con toda su gracia: “Ahí es donde la puerca retuerce el rabo”. ¿Cómo lograr que el PRD y el PRM se pongan de acuerdo para escoger candidatos provinciales y municipales comunes si la candidatura presidencial los dividió en dos partidos irreconciliables? La respuesta la pudiera dar este otro refrán: “El amor y el interés...” Por muy divididos que estén arriba, abajo todos son perredeistas... Y más que eso, ambos grupos quisieran conservar o ampliar su cuota de poder. Los actuales diputados y síndicos quisieran seguir siendo diputados y síndicos por encima de Miguel, de Luis y de Hipólito... ... Y otros quisieran serlo a despecho de todos los demás...

Tags relacionados