La lógica al revés
(2 de 2) Pocos temas se han debatido tanto como el que se refiere al aborto, y los debates continuarán sin parar entre los que están a favor y los que están en contra, incluido en este último grupo quien esto escribe. Estoy en contra del aborto no por un simple capricho, sino por razones de peso, basadas en principios y valores, y aunque no fuéramos cristianos, como quiera jamás lo aceptaríamos, sobre todo porque hay otros medios inocuos para controlar la natalidad. ¿Por qué no estoy de acuerdo con el aborto? Los reporteros que cubren las acciones bélicas que actualmente suceden en el mundo, cuando presentan algún informe noticioso, siempre recalcan que entre los muertos y heridos en los enfrentamientos había niños, ancianos y mujeres, muchas embarazadas. ¿Por qué destacan esa parte del informe? Porque esas personas constituyen la parte más vulnerable de la población y a todo el mundo, incluyendo a los pro abortistas, le duele que sufran los más débiles como consecuencia de esos conflictos, de los cuales ellos no son culpables. Por esta razón la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en muchas ocasiones ha llamado fuertemente la atención a las partes enfrentadas para que respeten la integridad física de esas personas, especialmente la de los niños. Ahora bien ¿Por qué la ONU auxilia a los niños víctimas de los conflictos armados, como es lógico esperar, y sin embargo no defiende a los niños por nacer y más bien se ha convertido en una firme aliada de los abortistas para que continúen asesinando a esas débiles, indefensas e inocentes criaturas? Es lamentable, muy lamentable que en todo lo que se refiera al aborto, la lógica funcione al revés. Como los pro abortistas parece que carecen del don de temor de Dios y siempre se van por el lado de la ciencia, esa misma ciencia ha demostrado hasta la saciedad, incluso hay muchos documentales al respecto, que desde el primer momento que se produce la unión del espermatozoide con el óvulo, se genera una explosión a nivel microscópico, indicando que ha comenzado el proceso de la creación de una nueva vida, un nuevo ser humano, el cual es único e irrepetible y si se le da el tiempo programado por la naturaleza para su nacimiento, poco a poco se irá convirtiendo en una persona adulta como nosotros. Es duro, muy duro aceptar que esa criaturita débil, indefensa e inocente sea la que tenga que pagar por los errores de una madre que en vez de protegerla y cuidarla con verdadero amor materno, la asesine sin ninguna compasión, despedazándola y tirando los restos en un zafacón, con la ayuda cómplice de médicos inescrupulosos que movidos por intereses espúreos violan los valores éticos contenidos en el Juramento Hipocrático que ellos juraron cumplir cuando se graduaron. En este sentido, quisiéramos hacerles tres preguntas tontas a los pro abortistas: 1) ¿por qué será que los médicos, afortunadamente una minoría, se preocupan tanto por la madre y no tienen la misma preocupación por la nueva vida que está por nacer? 2) ¿de qué manera llegaron ellos al mundo, los trajo la cigüeña o por medio del mismo proceso biológico por el que todos hemos pasado? 3) ¿por qué los abortistas les violan sus derechos a esas criaturitas por nacer cuando el primer derecho humano es, precisamente, el derecho a la vida y sin embargo se los violan y no pasa nada, ya que nunca he visto a ningún abortista pagar por ese crimen, y por otro lado, en el caso de las mujeres, ellas reclaman un montón de derechos, lo cual es muy positivo, pero violan el derecho fundamental a la vida de la criatura que llevan dentro, lo cual evidencia una postura egoísta y contradictoria? Parece que los pro abortistas se ganarán un premio Nobel por haber inventado algo nunca visto: poder aplicar la lógica, pero al revés y que todo el mundo se haga el “chivo loco” con los nuevos conceptos. Hace varios meses oí a una feminista decir que ella tenía todo el derecho para decidir sobre su cuerpo, eso no es discutible, pero no tiene derecho a eliminar a la criatura que lleva dentro porque es un cuerpo diferente, con personalidad propia, independiente del cuerpo de la madre, no un apéndice, ella es solamente el recipiente, igual como lo fue su madre cuando estaba embarazada de ella (de la feminista). Por las razones expuestas, vamos a esperar a ver cuáles son los posibles cambios que los congresistas harán a la ley observada por el Presidente, porque esos médicos comerciantes de la vida humana solamente están esperando que les abran una brechita para por ahí colarse y comenzar a hacer diabluras al estar protegidos por la ley. Por eso es que el colectivo pro aborto está presionando para que se modifique la ley, pero como los casos a los cuales se refirió el presidente Medina, en Estados Unidos, por ejemplo, representan a penas un porcentaje menor al 2% del total de los 18 millones de abortos que se realizan anualmente en ese país, ocupando el primer lugar los abortos de mujeres que ya tienen dos hijos y si quedan embarazadas de un tercero, entonces lo abortan, por consiguiente son muchas las mujeres que se practican más de un aborto en un año, y el otro grupo grande está formado por mujeres de todas las edades reproductivas que quedan embarazadas porque llevan una vida sexual sin compromiso, pero le tienen temor al “qué dirán”, por lo tanto el porcentaje que estaría despenalizado de acogerse las observaciones del Presidente, en nuestro país sería, más o menos, el mismo porcentaje que en Estados Unidos. Este pequeño porcentaje (2% del total de los abortos), no será suficiente para saciar la angurria de esos médicos abortistas y comenzarán a burlar la ley metiendo “gato por liebre”, es decir, sacar provecho del otro 98% que no será despenalizado, presentándolo maliciosamente como que son parte de los casos especiales que serían supuestamente despenalizados. Por esta razón los pro abortistas están rogándole a su dios Satanás para que dichas observaciones sean acogidas por los congresistas. De todos modos, si con este ensayo no se obtienen los resultados económicos que los pro abortistas esperan, creo que dentro de poco tiempo van a volver a presionar esgrimiendo nuevos argumentos falsos carentes de toda lógica, los cuales ya están preparando para lograr que el aborto sea completamente despenalizado en nuestro país; denlo por seguro.
