Susto, miedo, estrés, pánico

Cuatro palabras que asustan al hombre, al ser humano, a la mujer: miedo, susto, stress, pánico, son cuatro realidades que nos pueden afectar y nos afectan dolorosamente en el cuerpo. Cuando nosotros tenemos esos sentimientos en el alma, sufre también nuestro organismo y sufren también todas nuestras facultades físicas. Es por eso por lo que ante esos sentimientos que nos impiden avanzar, que hacen que nosotros seamos lo que debemos ser, hemos de buscar ayuda frente a todas esas realidades. Ayuda necesita el niño frente al susto o frente al pánico que sienten empresarios cuando ven sus empresas dañadas, o al stress de cada día o el susto que se pueda tener en un momento o los miedos, necesitamos la ayuda, ya sea de un consejero, de un sacerdote, de un médico. Por eso, frente a estas realidades, nunca busquemos solucionar solos, sino busquemos la ayuda que necesitamos, y nunca dejemos de recurrir a la ayuda de Dios, ayuda humana y ayuda de Dios frente al miedo, al susto, al stress, al pánico, llámese como se llame, ese sentimiento que paraliza. Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.