LÍNEAS DE GUERRA

24/7

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Juan Carlos GuerraSanto Domingo

Hace medio siglo cargamos el peso muerto de un sistema eléctrico deficiente, caro y contaminante. Desde la estatización hasta la capitalización, los caminos para resolver el problema han fracasado de manera estrepitosa. El problema energético, además de complejo es complicado, lo cual aleja en el tiempo su solución definitiva. Los más optimistas calculan cuatro años para que llegue el fin de los apagones, la escuela del pesimismo habla de dos décadas, mínimo. Los factores que inciden en los apagones y la factura cara: contratos onerosos con los generadores que en muchos casos cobran por capacidad instalada y no servida, un parque eléctrico sustentado en hidrocarburos, líneas de transmisión obsoletas, además de áreas en las grandes ciudades y la escasa cultura del pago en amplios sectores de la población. Aunque la indignación manda a la vía rápida de la nacionalización de todo el sector, el buen juicio y el sentido común obligan a la renegociación de los contratos de generación o esperar a 2016, fecha en que culminan, para cambiar las condiciones. Mientras tanto, el Estado dominicano puede tomar algunas medidas para aligerar el peso muerto de los cortes eléctricos y su alto precio. ¿Cuánto ahorraríamos en electricidad si todas las instituciones del gobierno, escuelas y hospitales instalan paneles solares y equipos de uso eficiente de energía? ¿Cuánto disminuiría el fraude eléctrico si iniciamos con la instalación de medidores prepagados? ¿Qué impacto tendría para la clase media el financiamiento blando para que condominios y torres de apartamentos generen su propia energía a partir de paneles solares? Si calculamos bien, estas medidas constituirán un efectivo tratamiento pre operatorio de cara a la cirugía mayor que debe ser la renegociación de los contratos de generación, el cambio radical de nuestra matriz energética y la creación de un sistema soterrado de transmisión eléctrica, al menos en los grandes centros urbanos y las zonas turísticas. Si tomamos este camino en poco más de una década tendremos energía limpia y barata 24/7.

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