¿Qué se entiende por oposición?

¿QUÉ ES REALMENTE?.- Los partidos que no son PLD y sus aliados, e igual que la sociedad civil insurgente, deben definir qué entienden por oposición, pues hay un juego oscuro y está metiéndose mucho gato por liebre. Se dice tanto, que más que consigna, ya es cliché lo de que no hay oposición. Y de que porque no hay oposición, el gobierno hace y deshace a su antojo. La cuestión se hace difícil de asumir, pues no hay lógica. Si no hay oposición, lo lógico es que se forme, pero nadie mueve un pie, ni un brazo, y a veces la boca. Aunque otros resuelven con una irresponsabilidad: No hay oposición porque el PRD está dividido y los perredeístas se dedican a confrontarse unos con otros y no con la administración peledeísta, o de Danilo Medina. ¿Y quién ha dicho que el PRD es la oposición por antonomasia? ¿Por qué no pueden otras fuerzas gestarse y constituirse en oposición? El escenario está en su lugar de siempre, y los papeles tampoco se han cambiado, y si los actores no acuden a la cita, entonces nadie debe quejarse de que no haya obra y el teatro luzca desierto...TODA UNA BURLA.- El clisé de que no hay oposición es toda una burla, y no solo a la población, sino a los propios políticos entre sí. Quienes más se quejan de que no hay oposición son los mismos perredeístas que deben asumirla, y que no ven la paja en sus ojos, sino en los de sus dirigentes. Entonces, la verdad es que los perredeístas contemporizan todos, los de arriba y los de abajo. Por ejemplo, se acusa a Miguel Vargas de ser un secuaz de Leonel Fernández, y podría serlo, pero sucede que el jefe del Estado no es Fernández, sino Danilo Medina. El problema, por tanto, no puede ser Vargas. Igual, el sector de Hipólito Mejía, opuesto a Vargas, busca un acuerdo con este sobre la base de hacer oposición. Primer punto, el sine qua non. Sin embargo ¿Hace Mejía oposición? Habría que preguntarle o él ñ motu proprio ñ decir qué entiende por oposición. No puede ser oposición verdadera declarar a cada momento que el presidente de la República lo está haciendo bien, que sus políticas son excelentes, y dar la misma opinión sobre determinados funcionarios...SI ES HONESTIDAD...- No es que el presidente Medina lo esté haciendo mal, y por igual sus funcionarios, pero Mejía no es maestro de escuela para estar dando pruebas nacionales y pasando de curso la actual gestión de gobierno. Y si considera que la honestidad política está primero, debo decirlo y no seguir haciendo gárgara, pues llegará el momento en que tendrá que tragarse esa agua. ¿Por qué Vargas debe hacer oposición y él no? Si fueran a jugar parejo, habría que admitir que uno es de Fernández y el otro de Medina. Que puede ser una equivocación, y que en el caso de Mejía sería doblemente grave, puesto que ya la cometió, y ese sufrimiento le nubla la razón. Al parecer se está confiando en Medina, del mismo modo que antes con Fernández. Los peledeístas por lo menos en estrategia no se equivocan: Barren hacia adentro, nunca hacia afuera. Además, la entereza política del actual mandatario, su subordinación a los intereses de su partido y de sus candidatos, no dejan lugar a dudas. Cuando fue vencido por el Estado, le ofrecieron villas y castillas, y se quedó en su choza esperando su oportunidad...CABEZA AJENA.- La experiencia de Dilma Roussef en Brasil es un espejo político, el más limpio de todos. La oposición vino de la calle, la sorprendió y se vio obligada a improvisar, y lo hizo a favor de los indignados, que en lo inmediato eran anónimos. ¿Quieren reformas? Pues van las reformas. Sin embargo, la real oposición, la estructural de los partidos y no la coyuntural de los jóvenes de clase media, lo que hizo fue recular. Si en Brasil no se cambian los órdenes y el gobierno se encamina tras otros objetivos, no es por la presidenta Roussef, sino por la oposición. Los políticos de Brasil se dieron cuenta de que la situación se les podía ir de las manos, y las elecciones no están muy lejos. Las lecciones las están dando en portugués, pero pueden traducirse. Lo del aumento en las placas es un abuso, pero un abuso consentido, pues fue aprobado en la pasada reforma, la que se hizo para conjurar el déficit del gobierno anterior. También admitido por todos los sectores, y no solo políticos. Entonces, si era necesaria la oposición, pero esta como ahora, brilló por su ausencia...