Tiempo para el alma
“Él es mi Dios y Salvador: confiaré y no temeré, porque mi fuerza y mi poder es el Señor”. Is. 12: 2. No te dejes vencer por el miedo. No le tengas miedo a tu poca o mucha capacidad. No te creas incapaz de acrecentar tu fuerza. Esfuérzate en fe, pues Dios, el poderoso, omnipotente, el rey de misericordia está contigo y no te desamparará. No hay persona, circunstancia o situación grande para Dios. Ve a sus pies y Él te dará el poder para vencer, para no temer, para ser capaz, para ser fuerte y valiente. ¡Anímate!

