Sembrando ingratitudes

Hasta que gran parte del sector rural –no sus falsos “líderes”- manifieste su indignación contra el Gobierno, no podrá alegarse que existe un abandono del agro como han venido expresando voces políticas que hablan para dejarse oír. ¿Dónde está la prudencia para la capacidad y calidad deliberativa cuando se emiten opiniones tan interesadas? Veamos en retrospectiva todo el esfuerzo gubernamental para recuperar y fortalecer los sectores productivos, y a la vez enfrentar los daños devastadores del “huracán Mejía” y los fenómenos naturales: ciclones, tormentas, riadas, plagas, sequías, etc. Estos supuestos defensores tratan de hacer olvidar que los cacaocultores recibieron todo el apoyo luego de estas devastaciones: el Gobierno pagó la deuda de 1,012 millones de pesos con bonos a los acreedores; entrega de Cartas de Saldo por 102 millones; apoyo a los desescombros y rehabilitación; incluso se obtuvo el cambio de categoría en la Bolsa de New York de C a B, que nos permite mejores precios. Para el café se han recuperado las exportaciones: 190 mil sacos a Puerto Rico; además, entrega de Cartas de Saldo por 196 millones de pesos y préstamos por 600 millones por el Proyecto de Mejoramiento del Café Dominicano. El arroz se ha compensado con más de 5,000 millones de pesos por el programa de pignoración, logrando la autosuficiencia nacional y exportando 600 mil quintales el año pasado; las musáceas han sido favorecidas con apoyos a los bananeros (crédito y mejores prácticas), y los productores de plátano con programas de control y erradicación de la Sigatoka y mejoramiento de los clones; la ejecución del Programa de Mercados, Frigoríficos e Invernaderos por 181 millones de dólares, puesto en ejecución aún con todas sus consecuencias pecaminosas y onerosas para el Estado; ejecución del PATCA con 2,300 millones de pesos y 14,000 productores beneficiados; consolidación del sistema fitozoosanitario y la erradicación de la Fiebre Porcina Clásica; apoyo a los avicultores por 325 millones de pesos; 552 millones otorgados en compensación a los productores de leche, y entregas millonarias constantes al Conaleche.

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