El acto de Danilo

Sin lugar a dudas, el sureño Danilo Medina se puso a prueba el domingo en Santiago y reafirmó el privilegiado posicionamiento con que cuenta en la actual coyuntura político-electoral. Sirva o no de mensaje a los demás aspirantes a la Presidencia y a los estrategas del PLD, lo cierto es que el hombre demostró con el concurrido acto con el que oficializó el arranque de su candidatura que internamente es la figura a vencer y con quien hay que contar para no afectar la unidad y mantener el poder. Muy a tono con lo que hemos planteado en entregas anteriores, el profesor Belarminio Ramírez sostiene que, para ganar, Danilo y la Primera Dama deben estar en la fórmula electoral del 2012, uno a la derecha y la otra a la izquierda, con Leonel al centro, como eje. En términos de números y de posibilidades, eso se corresponde o va en la misma dirección de la salvedad de Vinicio Castillo Semán con respecto a la necesidad de preservar la unidad PLD-Bloque Progresista: “Si esta alianza vencedora se rompe o desmorona se le estarían abriendo de par en par las puertas al retroceso que encarna la opción presidencial de Hipólito Mejía...”. Para hacer realidad la indicada fórmula, al igual para que el bloque siga en alianza con el PLD, no hay dudas de que “la figura clave es Leonel Fernández”, el único a quien todas las partes responden y con el que han expresado que tienen compromiso. La gran interrogante entonces sería: ¿Haría todo el “trabajo” el jefe de Estado, sin importar quién sea el candidato de su partido o “soltaría en banda” el expediente, de no figurar ni él ni Margarita en la boleta? Medina, por demás, siguió la línea del discurso de contenido y de respuesta a expectativas de diversos núcleos, promoviendo la conciliación y evitando la confrontación, especialmente con Leonel. De ahí el compromiso público de “seguir” lo que está bien de la obra de Fernández y de “completar” lo que falta por hacer. En cambio, Felucho Jiménez, tirado al ruedo como en su tiempo, vino virado o en otra onda. El hombre, que salió de Turismo con su “truño”, parece que le “guarda” a Leonel lo de la vice que en su primer período le iba dar y que a última hora puso en manos de Jaime David. Se explica lo de buscar con Danilo lo que no pudo con Leonel, no así el no perder oportunidad para “pegarle los cables” al líder.