EN POCAS PALABRAS…
El fútbol y la distensión mundial
Desde que empezó la celebración de la Copa Mundial de Fútbol, la atención del país se ha distraído mucho en el clásico cuatrienal que se celebra esta vez en Sudáfrica. Cada día más dominicanos prestan atención a ese deporte que no ha sido el favorito de los quisqueyanos. Diríamos que reemplazar a nuestro deporte rey, el Baseball (pelota) es tan difícil como decir que los argentinos bailan merengue mejor que los dominicanos y viceversa los dominicanos con el tango. Sin embargo, el mundial de Sudáfrica está ocupando las primeras páginas deportivas de los diarios nacionales que siguen con especial atención los resultados de este apasionante deporte. Escribía en una columna publicada en el Listín Diario el escritor y periodista argentino radicado en Miami, Andrés Oppenheimer, que el clásico futbolístico ha venido aumentando los raitings en las cadenas de televisión norteamericanas; apuntando que este deporte ya no se considera amateur entre los estadounidenses y que 3 millones de escolares están registrados en la Asociación de Fútbol Juvenil de Estados Unidos. Los latinoamericanos están también contentos de su participación en la Copa Mundial como Brasil, Argentina, México, Paraguay, Honduras, Chile, Uruguay. Oppenheimer, quien es un agudo analista de la política latinoamericana, dice que el Fútbol podría ser utilizado algún día por los norteamericanos como herramienta política para lograr distensiones con llamados países hostiles a Washington. Y pone el ejemplo de Brasil donde el presidente Lula usa la selección brasileña para aflojar tensiones nacionales o internacionales. Lo cierto es que este clásico mundial ha atraído que presidentes y dignatarios de diversas naciones se hayan trasladado a las lejanas tierras de Nelson Mandela a disfrutar del famoso evento del balompié.