UN MOMENTO
Madres
“Venid, los moradores del campo y la ciudad, entonemos un himno a las madres...”. Es por eso que toda una nación recoge su sentir en el Día de las Madres. En otros países se celebra en un día diferente, que es el último día del mes de mayo, como en República Dominicana, pero en cualquier país se tiene en cuenta a las madres. De una manera muy particular, nosotros queremos entonar ese himno al sacrificio de las madres, a la entrega de ellas; a las madres que hoy deben acompañar su entrega con el trabajo, a las madres que deben acompañar hoy su entrega con la soledad, porque tenemos muchas madres solteras. Por eso, todos los hijos e hijas vuelven la mirada a sus madres, y los que tienen ya a sus madres que han partido a la eternidad, vuelven también la mirada al recuerdo. Qué figura tan extraordinaria es la madre, qué figura la mujer que se presenta dándose enteramente en la maternidad. Con razón los pueblos, en todas las épocas y en la nuestra, cantan ese himno a las madres, y lo hacemos en el mes de mayo. Y esa figura, nos habla en la mujer que ejerce la maternidad, ejerce uno de los mejores servicios: una vocación magnífica al bien, por el bien de los hombres y de las mujeres de la humanidad. ¡Entonemos un himno a todas las madres de la creación! Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.