Raquel Cepeda

OH! MAGAZINE. ¿Cómo surge tu interés por el periodismo y por contar historias?R.c. Desde niña siempre escribí cosillas, luego en el New York de 1993 era bien cool hacer poesía, distintos grupos involucrados con el hip hop como The Fugees o Jada Pinkett (esposa de Will Smith) y muchos otros raperos, se reunían por toda la ciudad a leer, comentar y compartir sus creaciones; yo era uno de ellos. Había crecido en el hip hop, era mi gran pasión, y al descubrir la voz que fluía de mi ser y la fascinación que me causó la palabra, quedé enganchada. Comprendí que iba a ser periodista o iba a trabajar en música, ya en ese momento estaba trabajando en el mundo de la moda, haciendo estilismo y cuidando la imagen de The Last Soul, un grupo de raperos de Long Island. Entonces, poco a poco, pasé de escribir poesía a involucrarme con el periodismo y la narrativa. OH! ¿Qué significó para ti haber sido editora en jefe de One Word Magazine?R.c. Fue una experiencia interesante, comencé a cimentar las bases de mi película en diciembre del 2001, cuando trabajaba allí. Recuerdo que trabajaba directamente con farándula, fiestas y moda y comencé a publicar, junto a éstas, noticias y tips de sucesos a nivel mundial, como violaciones, maltrato a la mujer, etc. Luego, la tragedia del 11 de septiembre me dejó muy marcada, podía ser una editora de farándula pero en realidad en mi interior soy alguien que se identifica mucho con los problemas sociales y que lucha por los cambios, así que desde ahí empece a hacer los amarres de mi historia, a hablar con raperos, a conseguir dinero; deje la revista y me dediqué a esta mi pasión. OH! Cuéntanos un poco sobre Bling. ¿Por qué el tema de la Guerra Civil de Siena? ¿Por qué África? ¿Cómo haces click con esta historia?R.c. No ha sido casualidad. Luego de crecer en el hip hop y darle seguimiento a distintos temás sobre la problemática mundial a través de los medios de masa, luego de muchos viajes a distintos países, me veo identificada con este tema y viajo a África, país que me enamoró: su gente, su belleza, sus similitudes con nosotros los dominicanos y su calor. Fue así como nace Bling, que no es más que una mirada a las atrocidades que sufrieron muchos ciudadanos en la guerra de la manos de los rebeldes: violaciones, torturas, amputaciones y de cómo el mundo del hip hop comercial jugó un papel significativo en ella. OH! ¿Qué otros temas te preocupan y te gustaría tratar en un futuro?R.c. Quiero hacer varias cosas de temas como el SIDA, la prostitución infantil, el abuso contra la mujer, la chica que se va con el turista en busca de un futuro mejor. También el baile y la música, no sólo la problemática, la parte bella de la vida también va conmigo. Temas como el guaguancó o la bachata me interesan mucho, pienso que son un tema de futuro para explotar, algo así como “Baila conmigo”. OH! ¿Qué opinión te merece el cine que se está haciendo en el país?R.c. Me gusta que estemos creciendo, las producciones que he visto del cine dominicano tiene mucho bufeo, un poco de racismo también pero estoy segura de que vamos a mejorar, y que se explotarán otros géneros que no son la comedia. La cotidianidad nos trae muchas historias locales que contar. En cuanto a las actuaciones de dominicanos allá afuera, como Zoé Saldaña, por mencionar uno de ellos, me parecen geniales y me siento muy orgullosa.