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El arte y los artistas ponen el vendaje a este mundo herido

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Ivelisse VillegasSanto Domingo

Mientras los científicos buscaban la cura para el Covid- 19 y los médicos salvaban vidas, los artistas hacían que las almas temerosas y en soledad tuvieran un suspiro de esperanza con sus canciones. A veces, desde un balcón, en los techos de los edificios y través de distintas plataformas digitales se escuchaba una voz prodigiosa que cantaba y su melodía abrazaba a millones de seres humanos desprovisto de su libertad.

El arte ha sido la mejor arma para pelear esta crisis emocional y todos los sectores que la componen lo entendieron, y por esto ganaron respeto y admiración, por no esconder su talento en momentos en que perdían también a los suyos.

Es indescriptible para mí, el impacto que generó en las personas que consumen contenido cultural, ver los museos y galerías con sus puertas abiertas a lo virtual para mostrar performance y exposiciones. Sin quitar honores, a quienes en la soledad de sus estudios y calles desiertas dejaron que sus pinceles se gobernarán para crear obras maestras.

Camino a la sanación

Recientemente, el Banco Interamericano de desarrollo realizó la cumbre virtual ´Como Sanar un Mundo Herido´, de la que fui parte. Fue un bálsamo de sanación personal al escuchar conversatorios, charlas y ver exposiciones realizadas por artistas de distintos países de Latinoamérica, quienes llamaron la atención de los gobiernos de la región para que el arte y los artistas sean parte de la recuperación del mundo, luego de esta pandemia.

En estos momentos hay que unificar la sociedad, dijo Gustavo Dudabel, director de la Ópera de París, y de la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles, porque el arte y la cultura nos conectan y nos inspiran en estos momentos desafiantes en el que necesita sanar este momento de la historia.

Lo mejor de lo nuestro

Mientras veía los trabajos de los artistas en la cumbre, me sentí muy orgullosa de los nuestros, que también en medio de esta pandemia dieron lo mejor que tenían: su talento y creatividad para que nosotros con la música sanáramos las heridas de las múltiples pérdidas que estamos experimentando.

Y ya en esta etapa hacia la sanación, los artífices del entretenimiento del país se atrevieron a realizar la mayor premiación que el arte dominicano tiene, los Premios Soberano, a sabiendas de los riesgos. Y salieron airosos ante las miradas y aplausos de quienes solo ven desde una perspectiva positiva la premiación a lo mejor del arte.

No voy hacer una crítica de si hubo o no desaciertos en los nominados, o el escenario, o las luces; solo vi personas dando lo mejor de sí, un sector involucrado en una misma dinámica de creatividad, empresarios y talentos apoyándose unos a otros para hacer su mejor obra de sanación social en tiempos de pandemia. Como dice Marianne Williamson “Algo muy bonito le pasa a la gente cuando su mundo se ha venido abajo: una humanidad, una nobleza, una inteligencia superior surge justo en el momento en que nuestras rodillas golpearon el suelo.”

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