¡Necesitamos empatía colectiva!

El mundo está en ‘jaque mate’ desde el pasado mes de diciembre cuando fue descubierto el nuevo virus Covid-19, con lugar de origen en la ciudad de Wuhan, China. Ante esta situación, las principales actividades económicas, políticas, comerciales y sociales se han visto afectadas.

Los presidentes del mundo han tomado medidas drásticas para evitar la propagación, cerrando comercios, transportes y cancelando todo tipo de evento. América Latina no está exenta de esta pandemia que azota las naciones sin ninguna contemplación, afectando la elite social. Esto no quiere decir que las personas de clase media - baja no sean portadoras de esta enfermedad, sin embargo, aquellos que tienen acceso a relacionarse con extranjeros o a visitar alguna ciudad donde el brote está en su punto máximo, han sido candidatos perfectos para que el Covid19 se aloje en su cuerpo.

La bella Quisqueya, aquí donde el sentido del humor caracteriza el día a día, fue el epicentro de una celebración temática, donde el protagonista principal fue el Coranavirus.

En estos días de prueba, el conocimiento no sirve de nada si no implementas la empatía a distancia. Este virus no conoce de estatus, raza, ni color. Pensemos en nuestros abuelos, tíos y primos que ya son de avanzada edad. Propongo que nos quedarnos en casa, juguemos a la empatía colectiva, para poder ver la disminución de los contagios. Respetemos las medidas interpuestas por el mandatario de la República para así regresar a nuestra cotidianidad, pero con un sentido de la vida más reflexivo.

Cuide usted a los suyos, demuestre amor y cuidado a distancia, recuerde que después de un día gris, el sol sale más resplandeciente. Cultive la empatía colectiva.