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JOVENES TRAS SUS SUEÑOS

Mónica Sido, una joven con metas firmes

Mónica Sido

Mónica Sido

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Maritza Morillo SueroSanto Domingo

Crecer en medio de una familia dedicada a los negocios se convirtió en la fuente de inspiración que marcó el camino a seguir de Mónica Sido, una joven que desde niña su sueño era ser médico, pero pudo más la pasión por lo que es prácticamente un legado familiar, el mundo de los negocios.

Ya al terminar el bachillerato decide cambiar de ideas respecto a la medicina y entra a la universidad a estudiar Negocios Internacionales y Finanzas para continuar por la ruta diseñada por sus padres, con las que se había identificado desde su infancia.

Luego de concluir la carrera, que complementó con un máster en Administración de Empresas en Barna Business School, inicia su experiencia laboral, trabajando en el área de Planificación Comercial de una institución financiera por dos años, tiempo en el que, según sus propias palabras, “aprendí a desarrollar gran capacidad analítica y de relaciones interpersonales junto al equipo de trabajo que me rodeaba”. Durante esa permanencia de dos años en el trabajo anterior fue ideando un proyecto que le permitiera segmentar su propio negocio. Ya tomada la decisión vio un nicho en el mercado de la moda, arrancando con la apertura de Khaelle, una boutique de ropa de mujer con un estilo clásico, elegante y vanguardista, además de fina joyería para complementar las piezas clásicas.

Mónica Sido se define como una mujer enfocada, trabajadora, con metas y decisiones firmes y ganas de seguir superándose en el mundo de los negocios.

Al contar su historia de Emprendedora Sido dice que, nunca sintió miedo de levantar su propio vuelo. “Siempre confié en que podía lograrlo y esa seguridad me permitió no solo conquistar una buena clientela, sino que, hoy ya cuento con mi segundo local”, explica la joven de origen libanés.

“Mi experiencia ha sido muy gratificante, por lo que recomiendo a los jóvenes no rendirse ni desmayar en su deseo por superarse, a no escatimar esfuerzos a la hora de embarcarse en el tren de emprendurismo, hasta lograr el sueño deseado”. Concluye.

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