Por los caídos del 9-11
Estados Unidos recordó ayer viernes el decimonoveno aniversario de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, que se cobraron la vida de casi 3,000 personas, en un momento en que las dimensiones de la tragedia de la pandemia del coronavirus añaden sal a una herida que sigue sin cerrar y que cambió al país.
Con actos en Nueva York, el Pentágono y en Shanksville (Pensilvania), el país recordó unos atentados que llevaron a Estados Unidos a una costosa y aún inconclusa guerra contra el terrorismo global y cambiaron la manera en la que el mundo se enfrenta al problema de la seguridad y la confianza en los demás.