Irak refuerza la seguridad en la Zona Verde de Bagdad después de ataque

El Gobierno de Irak ha reforzado la seguridad en la Zona Verde, el barrio de Bagdad que alberga los principales edificios públicos y embajadas, después de un ataque con un cohete el pasado domingo, dijo hoy una fuente oficial. "Después del ataque con un cohete contra la embajada de Estados Unidos en la Zona Verde el domingo por la noche, las fuerzas de seguridad tomaron una serie de medidas para fortalecer la seguridad en el área", declaró a Efe el general Mohamed al Bayati, de la Dirección de Protección de Edificios Gubernamentales, del Ministerio del Interior. Entre otras medidas, se ha aumentado el número de policías que patrullan el lugar y se reforzaron los controles de seguridad en los puntos de acceso a la Zona Verde, según Al Bayati, que no aportó cifras concretas. La Zona Verde estuvo cerrada al público desde la invasión de Estados Unidos en 2003 y volvió a ser reabierta por primera vez el pasado diciembre, por decisión del primer ministro iraquí, Adel Abdelmahdi, con el objetivo de normalizar la vida de la capital después de concluir la ofensiva contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI). Al Bayati también aseguró que se han intensificado las labores de inteligencia para detectar cualquier intento de ataque con cohetes o con morteros y, además, se han abierto "líneas de comunicación" para que los ciudadanos denuncien amenazas a la seguridad pública. El pasado domingo un cohete tipo Katyusha cayó en la Zona Verde, en un área vacía cerca de la embajada de Estados Unidos, sin causar daños. La semana pasada, alegando motivos de seguridad, Estados Unidos ordenó evacuar al personal no esencial de su embajada en Irak, en la Zona Verde, y de su consulado en Erbil, capital de la región del Kurdistán (norte). Los gobiernos de Alemania y Holanda decidieron entonces suspender las tareas de capacitación de tropas iraquíes y kurdas que llevan a cabo sus soldados en este país, en base a las amenazas de seguridad. La evacuación de la embajada estadounidense de Irak, país que es aliado tanto de Washington como de Teherán, se produjo en plena escalada de la tensión en el golfo Pérsico. La tensión en la región comenzó a subir el pasado 13 de abril, cuando Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos denunciaron el supuesto sabotaje de varios petroleros en aguas del golfo Pérsico. En las últimas dos semanas, Estados Unidos ha enviado a aguas del Golfo el portaaviones "Abraham Lincoln", el buque de asalto anfibio "Arlington", baterías de misiles contramisil Patriot y bombarderos, tras denunciar que había detectado "indicios" de planes ofensivos iraníes contra sus fuerzas e intereses en Oriente Medio.