MONTESSORI en casa
Dormitorios Montessori, un espacio en el que los niños no solo descansen
Desde la cama hasta los estantes, todo en ellas está dispuesto a la altura y alcance del niño para mayor autonomía y crecimiento
Estas habitaciones, a diferencia de las tradicionales, están pensadas desde la perspectiva del niño.
Accesibilidad, orden, simplicidad y estética en la habitación de un niño puede parecer un imposible, pero son los rasgos característicos de los dormitorios Montessori, una tendencia en auge en redes sociales durante los últimos meses en Latinoamérica.
Estas habitaciones, a diferencia de las tradicionales, donde los muebles suelen estar diseñados para la comodidad de los adultos, están pensadas desde la perspectiva del niño.
Desde la cama hasta los estantes, todo en ellas está dispuesto a su altura y alcance, lo que permite que el pequeño explore, juegue, descanse, se vista y se desenvuelva sin depender constantemente de un adulto.
En República Dominicana la arquitecta Isbely Estévez ya está explotando este nicho. El interés inició cuando se convirtió en madre primeriza y, formándose para enfrentar esa nueva etapa, descubrió el método Montessori.
Isbely Estévez, arquitecta Montessori.
A la vez, encontró una necesidad que podía satisfacer desde su profesión a través de la combinación del diseño y esta metodología, especialmente en los hogares. Mientras más profundizaba sobre el método, más descubría que su hogar no era un espacio adaptado a las necesidades de crecimiento e intereses de su pequeño.
“Ver el mundo a través de los ojos de los niños, para mí fue algo totalmente impactante porque creo que con mis conocimientos de diseño yo puedo aportar un granito de arena a través de los ojos de María Montessori y su metodología”, dice en conversación con periodistas de Listín Diario.
Además del mobiliario a la altura del niño, Estévez señala la neutralidad de los colores y el uso de elementos que lo acerquen a la naturaleza como aspectos clave en el diseño de espacios Montessori. Como resultado: la autonomía e independencia en la vida del niño, más allá de su felicidad y los espacios bonitos.
“El Montessori siempre lo vemos en las escuelas, es traer un poquito de aquello para seguirlo practicando en la casa”, cuenta sobre su concepto Montessori en Casa. La demanda se ha centrado en el espacio donde el niño por lo regular pasa mayor tiempo: las habitaciones.
Desde esta perspectiva, las habitaciones no son concebidas solamente como un área de descanso, sino que se complementan con un juego calmado.
Diseño de un dormitorio Montessori con elementos que recrean la naturaleza.
“Un juego que puede mantener al niño entretenido sin que el papá necesariamente o la mamá tenga que estar el día completo pendiente del niño, porque sabemos que el espacio que hemos creado es un espacio que no solamente está pensado para su desarrollo, sino que es seguro”, argumenta Estévez.
Asimismo, explica que se puede también incluir mobiliario en otros espacios del hogar, como por ejemplo una escalera en la cocina para que el niño siempre se pueda mover y quiera participar en las actividades cotidianas, “quizás ayudarme a lavar un plato o involucrarlo, lo cual le da mucha autonomía”.
Costos
Cada diseño varía según el rango de edad en el que se enmarque el niño y el espacio responderá a unas determinadas necesidades o demandas, en caso de que el niño ya tenga capacidad de decisión y participe del proceso creativo.
Isbely Estévez ha notado un despertar del año pasado hacia acá que ha aumentado el contacto y la contratación de sus servicios.
“Las personas se están educando un poquito más al respecto y pueden entender cómo, al final de cuentas, una inversión estética y funcional puede ser un poquito mejor si aparte tiene cierto propósito involucrado en el desarrollo de mi hijo”, afirma la arquitecta.
Ya estos diseños se extienden a espacios de juego en locales comerciales. En estos, los costos de diseño y ejecución dependerán de la propuesta y de las dimensiones del lugar. Mientras que en el caso de los dormitorios puede ir desde $600 hasta $1800 dólares, cuando se tratan de espacios reducidos.
Espacio ambientado según la metodología Montessori para un local comercial.
Más allá de la decoración y la estructura
No obstante, la adquisición de mobiliario que cumpla con los aspectos necesarios para aplicar la metodología Montessori no es fácil de encontrar en el país. Si bien es cierto que hay oferta, la variedad no es vasta.
“En la gran mayoría de nuestros diseños, hacemos trabajos personalizados y a la medida. Tenemos colegas que se dedican a la ejecución de mobiliarios de ebanistería Montessori”, cuenta Estévez.
Tal es el caso de Bresairis Peralta, criada entre muebles gracias a una empresa familiar de fabricación y distribución de mobiliario, esta diseñadora de interiores ha registrado la primera marca de mobiliario infantil Montessori en República Dominicana: Rodea.
Bresairis Peralta, diseñadora de interiores y creadora de Rodea Mobiliario, primera marca de mobiliario infantil Montessori registrada en el país.
Pese a ser un nicho poco común y apenas tener dos años en el mercado, dice estar “full”.
“Y seguiremos creciendo porque la verdad es que es un tema que podría decir que está de moda ahora y la gente le gusta y es algo que aporta a la formación de los niños”, agrega.
Materiales seguros, acabados ecológicos, madera de calidad, pinturas de tonos claros y apta para la madera, además sin olores tóxicos, son algunos de los insumos que necesita para lograr cumplir con los parámetros de la metodología, así como también para equilibrar la estética, lo funcional y la seguridad.
“Lo ideal es que la habitación sea totalmente personalizada para el niño y que el niño pueda ser independiente dentro de su espacio; o sea, nosotros tratamos de tener una habitación donde el niño puede estar bajo supervisión, pero puede interactuar perfectamente solo en su espacio”, agrega explicando también que tratan siempre de que los muebles no impliquen ningún peligro para los pequeños de la casa.
El primer mueble que hicieron en Rodea fue una cama al ras del suelo y el testimonio más común entre los clientes es “logré que mi hijo durmiera en su propia cama”, pero su catálogo incluye mesas, sillas, estantes, torres de aprendizaje, libreros, espejos Montessori, roperos, pizarras, entre otros.
Cama de Rodea Mobiliario.
Ambas expertas del diseño y la arquitectura coinciden en que no se trata de una moda pasajera en redes sociales, sino que realmente esto tiene un impacto en el desarrollo infantil.
“Más que una moda sería un estilo de vida, porque el que conoce el método y se adapta a esos lineamientos, pues no quiere salir de ahí; se nota la diferencia (…) o sea, un niño que explora, que puede ver, que puede tocar, que puede hacer sus actividades solo”, agrega Peralta.
Desde sus experiencias consideran que esto se complementa con lo que los niños van aprendiendo en el colegio y que, como resultado, se observan niños más autónomos, niños que entienden más, que también se sienten felices.
Múltiples beneficios
La psicóloga clínica y experta en el método Montessori, Claudia Tavárez, confirma que estos “espacios ambientados” y su decoración no es un lujo, “sino más bien una necesidad y la necesidad es que le demos prioridad al niño, a sus necesidades”.
Mayor concentración, autonomía, seguridad, confianza, orden e independencia, son algunos de las características que ha visto en los niños que conviven en los espacios ambientados, fruto de la aplicación del método Montessori.
“Se puede ver también, por ejemplo, como su lógica y su razonamiento es más desarrollado, porque no es un adulto el que le enseña, sino él mismo quien va aprendiendo con los materiales que están diseñados precisamente para que el niño tenga un autoaprendizaje”, agrega Tavárez.
Asimismo, explica, los espacios son preparados para que el niño tenga la intención de respetar y cuidar el ambiente que los rodea. Esto también hace que el niño tenga un sentimiento de respeto hacia su ambiente y también entonces hacia los demás, hacia las personas.
Tavárez recomienda preparar estos espacios desde que nace el niño y adaptarlos según su crecimiento y sus necesidades.

