Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

REALIDAD Y FANTASÍA

Otra vez la luz eléctrica

María Cristina de Carías

María Cristina de Carías

Avatar del Listín Diario
María Cristina de CaríasSanto Domingo, RD

Desde que empecé a escribir artículos en los periódicos he tocado el tema de la luz eléctrica. En comentarios y en episodios protagonizados por Emma o por mis nietos, la luz ha sido protagonista, brillando con la luz que nos roban a los sufridos ciudadanos de este país.

En una ocasión, estando el mayor de mis nietos muy pequeño, escribí que mi mayor temor era que algún día mi nietecito me preguntara: “Abuelita, ¿qué era la luz eléctrica?”.

Han pasado varios años desde entonces y hoy en día ese nieto es un jovencito. Detrás de él crecen los demás nietos, pero ninguno de ellos ha conocido un servicio eléctrico normal en la ciudad en donde viven. Solo cuando van de vacaciones a algún hotel de playa, disfrutan del servicio eléctrico sin interrupción.

Estando una vez en uno de esos establecimientos hoteleros, para pasar el fin de año, uno de ellos me preguntó curioso por la razón de que allí, siendo un hotel solamente, el servicio eléctrico fuera perfecto, y en cambio en la capital, la ciudad más importante del país, solo había luz a ratos. Tuve que explicarle que los hoteles habían instalado su propio servicio de electricidad, al no poder contar con ese servicio estable de parte del país.

Aquello lo dejó confuso. Al rato vino con una propuesta: ¿por qué cada ensanche no hacía lo mismo que los hoteles? Le expliqué lo del costo y el factor de que los hoteles estaban exentos de impuestos y los ensanches no. La verdad es que no comprendió demasiado aquel lío y yo tampoco estaba para demasiadas explicaciones en mis anheladas vacaciones.

Ahora, pasados otros años más y varios gobiernos, seguimos como antes sino peor. La semana pasada anunciaron un aumento en la tarifa eléctrica. Lo que no anunciaron fue una mejora en ese servicio que pudiera justificar ese aumento, no señor, al contrario, los apagones se han acrecentado. Los que poseen un inversor no tienen oportunidad de que estos se recarguen lo suficiente para soportar el nuevo apagón. Por mi sector la luz se va de paseo como a las nueve de la mañana, si no antes. Vuelve a eso de la una y media o dos. En la prima noche se vuelve a ir para volver como a las once de la noche.

Definitivamente somos un país conformista. Recuerdo que una vez en una población de Colombia, empezó a fallar la luz eléctrica, como los apagones se multiplicaron y no se vislumbraba mejora, los indignados habitantes la emprendieron en contra del gobierno, armando tal revuelo con incendios y saqueos que este se apresuró a remediar el mal y nunca más hubo crisis eléctrica.

No estoy haciendo un llamado a la revuelta, pero sí deberíamos hacer una protesta cívica. Si todos nos negamos a pagar el servicio, hasta que este mejore, tendrán por fuerza que arreglar el asunto

Tags relacionados