La lectura de las cartas del tarot

Usualmente el que anda recorriendo caminos esperando encontrar respuestas del porqué estamos por aquí, de dónde venimos y hacia dónde vamos o simplemente nos inquirimos sobre el porvenir difícilmente pasamos por alto el Tarot. Es una herramienta que ayuda a enfrentar las situaciones personales, puede llegar a ser terapéutico en las manos correctas. En las manos equivocadas puede ser objeto de manipulación y de inquietud, tal como sucede en todos los demás gremios, sin excepción.

Las cartas per se no tienen la capacidad de hacer daño, por el contrario, es una valiosa ayuda para hurgar en las profundidades del subconsciente, tal como estudió Jung, Médico psiquiatra y psicólogo suizo. Esas tarjetas están llenas de lo que Jung llamó Arquetipos, que son esas figuras que te hablan de situaciones de la vida. se relacionan con la astrología, la numerología y con las 22 letras del alfabeto hebreo. Es un juego compuesto de 78 láminas: 22 Arcanos mayores y 56 menores. Su origen continúa siendo un velo de misterio, estudiosos del tema aseguran que fue inventado por los antiguos egipcios como libro de la vida.

Las cartas están divididas además en cuatro mazos, de ellas se desprenden todas las cartas que utilizamos en distintos juegos, incluyendo el póker. Cada grupo se relaciona con un elemento. El oro: la tierra: los asuntos materiales. El basto, el elemento fuego, nos habla de acción y trabajo. La espada, el aire, nos habla de las palabras, documentos y el pensamiento, las Copas, representan el agua. Existe una Corte Real: el Rey, la Reina, el caballero, el paje y 10 cartas.

La combinación de estos en la forma en que se disponen en las tiradas da información de la situación o persona y se hacen tiradas también de preguntas específicas. Evidentemente existe una tradición secreta con respecto al tarot que se ha perdido en la noche de los tiempos.

El doctor S. Raynaud, sabio francés, edifica acerca del Taro en su libro G.M. cuando expresa que el Taro es un Libro de los Libros y la representación esotérica. Conservado y guardado en el Templo, sus claves adivinatorias no se revelaban más que a los que llegaban a los más altos grados del sacerdocio de Isis.

Una consulta con el taro no debe ser utilizada como herramienta de predicción sino de meditación, cada lectura tiene el sello del momento realizado nada está escrito sobre piedra. Todo puede cambiar hacia el futuro, hablamos de tendencias. El taro funge como espejo, ayuda a que el usuario vea circunstancias que no ha visto y mire las situaciones bajo otra óptica y accione tomando la responsabilidad de sus propias decisiones. La fe y la voluntad son factores fundamentales para que se produzcan o se eviten situaciones.

El saber es parte de la necesidad básica actual, si estudiamos, bajando un poco los altos muros impuestos por el dogmatismo podemos darnos cuenta que el estudio nos puede llevar a un entendimiento de las circunstancias, incluyendo el encontrar a Dios en todo.