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FÁBULAS EN ALTA VOZ

No es represión, es organización

Marta Quéliz

Marta Quéliz

Hasta los niños saben que en este país no hay orden en la Policía Nacional. Aunque con el tiempo se ha acentuado, esta debilidad no es un asunto de ahora. Urge una buena organización en las filas del “cuerpo del orden”, y al parecer se está trabajando en ello. Ha llamado mi atención cómo han tildado de “mano dura” al nuevo director de la entidad, mayor general Eduardo Alberto Then. No es que esté mal. Esa posición es necesaria para retomar el control del orden, si lo había, pero me gusta más que la gente entienda que no es represión lo que se necesita, es organización.

Funcionamiento fabuloso

Para ver cómo marcha el desenvolvimiento de las autoridades policiales en la ciudad fabulosa, me trasladé allí. Me conmovió ver cómo la población trabaja hombro con hombro con los agentes para identificar los problemas, si los hay, para encontrar soluciones viables sin la necesidad de que haya represión, sino organización. Las críticas en aquel lugar se convierten en aportes fructíferos para el logro de la seguridad y la paz social.

Respeto mutuo

En aquella ciudad de ensueño no hay abuso de poder, pero mucho menos desacato a la autoridad. Hay una buena relación entre oficiales y ciudadanía. Los primeros saben cuál es su función, que es poner el orden y salvaguardar la integridad y la tranquilidad de la población. La gente está clara en que debe cooperar para que todo marche. No es que allí no se delinque, es que los procesos para hacer cumplir la ley se llevan a cabo sin atropellos y, no importa quién viole los reglamentos, el pago por ello es igual para todo el mundo. Gracias a ese funcionamiento es que allí le están diciendo adiós a los atracos, a los robos, a las muertes violentas, a la música a todo volumen y a todo tipo de crimen. Ahora es la empatía la que está reinando.

Voto de confianza

Visto el manejo que tienen en aquel lugar fabuloso, había que volver a la realidad de República Dominicana, con la fe puesta en que para llegar a esos niveles, se debe tener una población que dé un voto de confianza a las nuevas autoridades por ser este un aspecto tan importante para hacerle frente a la seguridad. Que hay que usar la “macana” como espera la primera dama, Raquel Arbaje, es cierto. Y muestro mi aprobación porque entiendo que ella hizo su comentario haciendo alusión al carácter que se le debe poner a la lucha contra la delincuencia, a los hechos violentos, al desorden y a la falta de respeto que abunda en el país. Hay quienes se tomaron el término de manera literal, pero cada quién entiende las cosas como le parezca. Lo cierto es que, urge que se retome el orden y el respeto en esta sociedad.

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