Kairós
Señor: perdona mis culpas
Esdras 9,5-9 “Dios mío, de pura vergüenza no me atrevo a levantar el rostro hacia ti, porque nuestros delitos sobrepasan nuestra cabeza, y nuestra culpa llega al cielo”. El reconocimiento o confesión de culpabilidad de parte nuestra nos abre un espacio vital en la relación con Dios. ?