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El dibujo mejora tu memoria

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Moisés Balbuena V.Santo Domingo

¡Seguro que sí! ¿Pero alguna vez asociaste el dibujo con la memoria? Lo más probable es que no. Esta relación llega porque el cerebro, como órgano majestuoso y complejo, es responsable de las funciones neurocognitivas como la memoria, función indispensable para el buen desempeño de las personas en la vida cotidiana. ¿Qué sucede al dibujar? Para dibujar se requiere que ciertas áreas del cerebro se activen y se produzcan procesos neuropsicológicos como la atención, concentración, inhibición, habilidades visoperceptivas (aquellas que permiten reconocer y discriminar los estímulos visuales).

Gracias a los aportes de las neurociencias y los avances de neuroimágenes se sabe que, cuando dibujamos, también estimulamos áreas de nuestro cerebro implicadas en la memoria a corto plazo y memoria a largo plazo, que registra los recuerdos.

“En neurociencia sabemos que mientras más se ejercite el cerebro, mejor funcionamiento tendrá durante la vida adulta; el dibujar surte efectos de relajación y de entrenamiento neurocognitivo, por lo que recomiendo que se utilice el dibujar como herramienta para la memoria desde la etapa de la niñez”, asegura el especialista Diógenes Lizardo.

Existe una base científica que lo demuestra. Según las investigaciones basadas en el funcionamiento del cerebro, hay varias evaluaciones o tests psicológicos que sustentan las bases científicas del dibujo y eventos registrados en la memoria del evaluado. Estos tests como Dibujo de la Figura Humana (DFH), el dibujo de la familia, el test de la casa, el test del árbol y la Figura Compleja de Rey (Alzheimer), cada uno de ellos registran las bases científicas para describir, entender y predecir algún tipo de anomalía, sensaciones, emociones, percepciones, pensamientos y más en el paciente a través del dibujo.

El especialista de la rehabilitación neurocognitiva, el Lic. Lizardo, explica cuándo un individuo puede darse cuenta que necesita ayuda para la memoria: “A menudo, las personas que sufren alteraciones de memoria experimentan malestares en diversas esferas de la vida diaria, en la familia, la vida de pareja, el área laboral y social, por lo que la evaluación neuropsicológica es necesaria para determinar los déficits cognitivos patológicos”.

Sin Límites

No hay una edad ni un tratamiento específico para usar esta técnica; lo que sí destacan los expertos es que en estos tiempos, con el uso y abuso de los medios tecnológicos, muchas personas desde muy temprana edad presentan dificultad para retener actividades rutinarias. Esto significa que en la población juvenil se presenta deterioro en la memoria por un tema de atención y filtro cognitivo que permite en ellos evocar conocimientos que previamente habían dominado.

Algunos podrían llegar a pensar que necesitarían una recomendación médica para esta práctica. La realidad es que no, excepto con algunos casos como en la demencia tipo alzhéimer o demencia tipo parkinson que se utiliza como receta en los estados iniciales de la enfermedad.

Para la neuropsicóloga Norma Duarte, los beneficios en el ser humano son ilimitados: “El dibujo nos permite contar historias fascinantes. Pero sobre todo los beneficios de mantener un cerebro ejercitado, motivado, flexible, una característica que se conoce con el nombre de neuroplasticidad; son innumerables los beneficios de la técnica del dibujo para el bienestar y equilibrio del ser humano”.

Se debe hacer hincapié de que no existe una técnica específica; la persona puede ir desde un garabato hasta una obra de arte. Otro dato es que la calidad del dibujo no es lo relevante para ayudar los procesos de memoria, lo importante es que la persona haga uso de funciones neurocognitivas implicadas en el dibujar y exprese su creatividad, emociones y sentimientos, ya sea con lápiz y papel o lienzo y pincel.

¿Hombre o mujer?

Sobre la probabilidad de llevar estadísticas sobre quién utiliza más este recurso, la realidad es que no se cuenta con estadísticas significativas en ese sentido. Lo que sí se puede percatar en la práctica profesional es que tanto el hombre como la mujer realizan la actividad del dibujar como medio de expresión de sus emociones.

Las recomendaciones

El tiempo que una persona dedica para hacer del dibujo una práctica habitual para mejorar la memoria, puede variar. “El tiempo lo marca la propia persona, lo importante es que la realice como una actividad placentera, con la conciencia plena de saber que le hará bien para el funcionamiento óptimo de su cerebro, ejercitado y relajado”, concluye la licenciada Duarte.

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