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Fundación Hojas Verdes, por un mejor uso de los desechos

Proyecto. Tienen en agenda un 'green day', para que la familia se reúna en un lugar y contribuya con el cuidado del ambiente.

Proyecto. Tienen en agenda un 'green day', para que la familia se reúna en un lugar y contribuya con el cuidado del ambiente.

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Carolina PichardoSanto Domingo

Desde 2015 la Fundación Hojas Verdes República Dominicana se asentó en el país con la finalidad de concienciar a las empresas sobre el cuidado del medioambiente. Su musa fue un organismo similar creado en Guatemala, en 2012, que tenía como propósito dar un manejo responsable a los desechos de las industrias y talleres automotrices, específicamente los lubricantes usados, filtros y baterías.

Así lo explica el director de la fundación en el país, Franklin Ortiz, quien dice que esta iniciativa no solo podría prevenir situaciones catastróficas para la naturaleza, sino también ayudaría a que las personas sean más precavidas a la hora de dejar a un lado los desechos sólidos.

El objetivo de esta entidad: visitar las empresas vinculadas al mercado automotriz e industrial, conocer dónde son dejados sus desechos, tratar de reciclarlos y, con relación a sus empleados, orientarlos para que le den un aporte a la naturaleza, mediante la siembra de árboles y talleres de concienciación.

Asimismo, a través de talleres trata de mejorar la forma de destrucción de estos materiales, siempre y cuando cumplan con las normas ambientales.

“En nuestro país se importa aproximadamente 1,2 millones de galones de lubricantes cada mes, menos del 5% es reciclado. Importamos alrededor de 12 millones de filtros al año, de esos, menos del 1% tiene un manejo responsable, todo el resto va a los vertederos, que en nuestro país, están a cielo abierto”, manifiesta.

Explica que en República Dominicana no existe una fiscalización correcta de los recursos utilizados en industrias y talleres, debido a que en la mayoría de los casos las autoridades desconocen el destino de estos después de ser utilizados.

“Nuestro país no tiene políticas medioambientales definidas. Nadie fiscaliza los talleres, tú vas a un taller a hacerle un cambio o una reparación al vehículo y nadie sabe qué pasa con el aceite y la batería”, dice Ortiz.

Indica que para tener conocimiento de cómo realizan estas prácticas en otros países ha visitado Costa Rica y México, donde los avances son mayores que en República Dominicana, con relación a la labor de las empresas en el cuidado de la naturaleza.

“Invitamos a las empresas a colaborar en este programa para compensar a la naturaleza, descartando apropiadamente el aceite usado, filtros y baterías, donándolos a la Fundación Hojas Verdes RD”, comenta.

Ortiz explica que la fundación aún se “encuentra en pañales”, pero que está camino a realizar otros proyectos que ayudarán al medioambiente. Entre los planes está implementar un programa educativo en el que los estudiantes aprenderán cuál es el fruto que se siembra en su provincia, y que a partir de este conocimiento tengan como práctica sembrarlo en su comunidad.

También dice que con parte de los recursos captados han donado mochilas a niños, a cambio de que estos siembren un árbol, con el propósito de que aporten a la naturaleza y que, al mismo tiempo, sean retribuidos.

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